En las alturas del altiplano chileno, especificamente en la comuna de General Lagos en la Región de Arica y Parinacota, un joven veterinario Aymara desarrolla un modelo de ganadería sustentable de llamas, a más de cuatro mil metros de altitud.
Rolando Manzano, ganador del concurso Jóvenes Innovadores 2020 de FIA, trabaja en un prototipo de infraestructura productiva para mejorar los procesos ganaderos en el punto más septentrional del país.
"Consiste en generar un modelo innovador de producción de llamas que incluirá infraestructura productiva, adaptación al cambio climático, manejo de pastoreo y control de los animales y, de esa manera, mejorar los índices productivos de una manera sustentable y ecológica", relatò el veterinario de la Universidad de Concepción..
El proyecto es actualmente apoyado por la Fundación para la Innovación en Agricultura (FIA), institución que busca promover el desarrollo en las zonas más aisladas del país.
"La llama es reconocida por ser el animal del futuro, por su resistencia al cambio climático y su fácil alimentación. Así que estamos muy entusiasmados de apoyar esta iniciativa que insta al cambio, convirtiéndose en un motor para superar desafíos sociales, culturales y económicos que se presentan en Visviri" indicó el Director Ejecutivo de la institución, Álvaro Eyzaguirre.
El altiplano chileno sufre desde hace varias décadas un proceso de despoblamiento paulatino producto de la falta de oportunidades laborales y el descenso en la cantidad de cabezas de ganado.
El altiplano chileno cuenta con una población de más de 17.000 llamas, 13.000 de las cuales viven en la comuna de General Lagos, lo que forma parte esencial de la economía local y de las tradiciones del Pueblo aymara.
