Organizaciones sociales están molestas pues se trata de la única capital regional del país que no cuenta con red de transporte.
Los taxis colectivos son el único medio de transporte que circula por las calles de Coyhaique. Y así se mantendrá luego de que el Consejo Regional (CORE) rechazara por mayoría el proyecto que busca implementar una red de transporte público, con buses eléctricos, en la capital de la región de Aysén.
Se trata de una iniciativa que lleva más de nueve años en tramitación y que busca dotar a Coyhaique -la única capital regional que no cuenta con transporte público- de una flota de 37 buses eléctricos más un terminal operativo, con una inversión de 15.000 millones de pesos aportados por el Gobierno Regional y otros 25.000 millones de pesos desde el Ministerio de Transportes.
Por ocho votos en contra y una abstención, los consejeros de Renovación Nacional, la UDI, Evópoli y dos de la Democracia Cristiana rechazaron el proyecto, desatando la molestia de las organizaciones sociales que estuvieron presentes en la sesión plenaria.
"Me voy muy triste y decepcionada" indicó Margarita Arismendi, presidenta del Consejo de Salud del hospital regional de Coyhaique, quien indicó que esperaban más de los consejeros pues a quienes ella representa, las personas con discapacidad, "necesitan mucho este tipo de locomoción".
Si bien los consejeros regionales, el día de la sesión, fundamentaron su rechazo en que las calles de Coyhaique y la ciudad no está preparadas para lo que ellos denominaron un "TransCoyhaique", luego explicaron que se busca evitar que la gobernadora, Andrea Macías, gaste el presupuesto regional para mejorar su ejecución presupuestaria.
"A la gobernadora sólo le interesa deshacerse del presupuesto regional para mejorar ejecución, a pesar de enarbolar el discurso de que no financiaría a los sectores", indicó el consejero de la UDI Omar Muñoz, quien espera que el costo del proyecto sea asumido por el Ministerio de Transportes.
La Gobernadora calificó el rechazo bajo una "lógica política pequeña" que además deja de lado la necesidad de los vecinos.
Tras el rechazo de los consejeros, el proyecto puede ser presentado ante el Consejo Regional transcurridos 30 días. Y desde el Gobierno anunciaron que transcurrido ese plazo volverán a solicitar el financiamiento al GORE, apostando porque la presión social permita aprobarlo. De lo contrario, debe ser excluido de revisión por el plazo de un año.
A nivel social crece el rechazo a la decisión de los consejeros. Por ello ya hay convocada una manifestación para este martes 31 de octubre, coordinada por la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Coyhaique, quienes esperan que los cores reviertan su voto en treinta días más.
