A las 09:20 horas de este lunes comenzó del juicio oral contra Celestino Córdova Tránsito, de 27 años, el único imputado por el atentado incendiario en el que murieron el 4 de enero de 2013 el agricultor Werner Luchsinger (75) y su esposa, Vivian Mackay (69), en su casa en el fundo Lumahue de la comuna de Vilcún.
La audiencia se efectuó bajo fuertes medidas de seguridad al interior y exterior del Tribunal Oral en Lo Penal de Temuco, coordinadas entre Gendarmería y Carabineros.
Al exterior se instalaron vallas metálicas dado que varias comunidades y organizaciones pro mapuche habían convocado a una manifestación en apoyo del machi, la que terminó en el Tribunal ubicado en la calle Bulnes, a los pies del Cerro Ñielol.
Al cierre de los primeros alegatos se registraron incidentes fuera de la Corte y al menos siete vehículos de prensa y de personas particulares resultaron dañados, informó la Fiscalía.
Aún no se confirma que haya personas detenidas, pero extraoficialmente se habla de al menos dos.
Vehículos terminaron con sus vidrios trizados o quebrados. (Foto: @FISCALIA_IX)
Optimismo en la Fiscalía
A partir de hoy los jueces Luis Sarmiento, Gonzalo Garay y Óscar Viñuela escucharán durante 20 días los elementos de prueba presentados por la Fiscalía y los querellantes.
El Ministerio Público, representado por los fiscales Cristián Paredes, Alberto Chiffelle, Miguel Velásquez y Luis Arroyo, informó que presentará a más de 60 testigos y peritos y 43 pruebas materiales.
La defensa, en tanto, presentará 24 testigos y peritos.
"En nuestros alegatos de apertura hicimos una exposición lata, pormenorizada, de los hechos que serán sometidos a juicio, también una explicación más breve poniendo atención a los elementos relevantes de prueba que servirán para acreditar de manera indubitada la participación de autor de Celestino Córdova. Por último, hemos hecho hincapié en cómo en este caso se presentan elementos que permiten calificar los hechos como delitos terroristas", dijo al término de la audiencia el fiscal Paredes.
"A través de la prueba pericial que se rendirá en juicio quedará acreditado que don Werner Luchsinger murió al lado de su arma, murió al lado de su cónyuge, intentando defenderla", agregó el persecutor.
Un alto contingente policial se instaló temprano fuera del Tribunal Oral en Lo Penal, mientras un helicóptero lo sobrevuela. (Foto: Juan Antipán)
Defensa: No lograrán acreditar culpa
El acusado tiene como abogado privado a Pablo Ortega y en la audiencia informó que hará uso de su derecho a guardar silencio y no declarará en el juicio.
"La defensa ha sostenido y sostendrá que se trata de una prueba indiciaria en contra de nuestro representado (...). Estamos, en ese sentido, confiados en que la prueba hable y que dé razón a la parte defensora en el sentido de que no se va a lograr acreditar la participación de don Celestino Córdova en los hechos concretos por los cuales está siendo acusado. Digo los hechos materiales, porque él está siendo acusado como autor", resaltó Ortega.
"Ciertamente, creemos también que el Tribunal Oral no dará lugar a la petición de los querellantes y acusadores de considerar estos hechos como terroristas, toda vez que no se dan los requisitos para cumplir las normas constitucionales, el concepto constitucional de terrorismo", indicó el jurista.
La Fiscalía comenzará su presentación de pruebas a partir de las 09:00 horas de mañana martes. El tribunal autorizó a Córdova a ausentarse durante algunas jornadas debido a un daño ocular que sufrió producto del contacto de cloro y que lo obliga a someterse a controles y exámenes médicos.
El juicio oral se abre mientras está pendiente un pronunciamiento del Tribunal Constitucional relativo a las penas solicitadas en este caso: en el marco de la imputación bajo Ley Antiterrorista la pena mínima que arriesga Córdova de ser declarado culpable es el presidio perpetuo calificado, lo que es denunciado por la defensa.
Doble acusación
Celestino Córdova permanece en prisión preventiva en la Cárcel Pública de Temuco y enfrenta cargos en calidad de autor no sólo por el caso Luchsinger, sino también por un atentado incendiario y robo con violencia en el Fundo Santa Isabel, en Vilcún, ocurrido la noche del 22 de diciembre de 2012.
Según la parte acusatoria, Córdova junto a un número indeterminado de personas armadas irrumpió en la propiedad de la familia Seco Fourcade, donde se encontraba el dueño del predio, su esposa, su hija y yerno, más dos asesores del hogar.
En el lugar redujeron y amenazaron a las víctimas –tres de las cuales resultaron con lesiones leves- registraron el inmueble sustrayendo diversas especies, dos celulares y ocho armas de fuego: tres escopetas, dos revólveres, dos rifles y un fusil, además de munición de diverso calibre.
En forma paralela "el imputado y sus acompañantes rociaron el inmueble con combustible y le prendieron fuego, provocando la destrucción completa de la casa, además de tres vehículos estacionados en el lugar", dice la Fiscalía.
Córdova arriesga presidio perpetuo calificado. (Foto: Juan Antipán)
La madrugada del 4 de enero de 2013, Córdova y otro grupo indeterminado habría accedido a la casa del Fundo La Granja Lumahue de la localidad de General López, en Vilcún, donde se encontraban Luchsinger y Mackay.
"El acusado y sus acompañantes efectuaron diversos disparos con armas de fuego, y agredieron a las víctimas, Luchsinger intentó repeler el ataque haciendo uso de su arma de fuego, logrando herir a Córdova a la altura del tórax. Acto seguido, el acusado y sus acompañantes rociaron el inmueble con combustible e iniciaron el fuego dejando al matrimonio al interior, provocando la muerte a ambas víctimas por carbonización en incendio de tipo homicida", sostiene el Ministerio Público, que imputará cargos a Córdova por los delitos de incendio de lugar habitado, robo con violencia, incendio de bienes muebles e incendio con resultado de muerte.
La Fiscalía invocó la Ley Antiterrorista argumentando que los ataques "tuvieron como finalidad producir temor en la población, tanto por tratarse de hechos coordinados, reiterados, conforme a un plan determinado, como por el carácter, naturaleza y efectos de los medios empleados para la comisión de estos ataques".
Por el primer hecho, solicita una pena de 36 años, sosteniendo la tesis terrorista, y por el segundo pide presidio perpetuo calificado.
El machi mapuche está preso desde el día mismo del atentado, el 4 de enero de 2013, y se le imputan cargos por otro ataque a la familia Seco Fourcade en diciembre de 2012. (Foto: UPI / Archivo)
Ataque a fundo de Carlos Heller
En horas de la madrugada en el sector Rucahue de la comuna de Freire fue incendiado un galpón en el fundo Santa Teresa de la sociedad agrícola Ancali, de propiedad del empresario Carlos Heller, del grupo Falabella y principal accionista de Azul Azul.
Al lugar concurrió Bomberos de Temuco y Padre Las Casas para sofocar las llamas.
Los desconocidos además dejaron rayados con consignas pidiendo la libertad del machi Celestino Córdova.
La Policía investiga este hecho para intentar determinar a los responsables.