El fiscal de Yungay, Mario Lobos, constató las dificultades del rastreo subacuático.
Se solicitó a la hidroeléctrica Puntilla la disminución del caudal.
La zona de la desaparición no es apta para el baño, por la existencia de remansos y el fuerte torrente del caudal.
Un intenso trabajo de rastreo se realizó este jueves en el sector Salto del Itata, en la comuna de Yungay, donde el pasado lunes desapareció Saúl Sandoval, de 36 años, tras un fallido piquero en las aguas del río Itata.
El fiscal jefe de Yungay, Mario Lobos, coordinó en terreno esta cuarta jornada de búsqueda, señalando que "se trata de un río con bastante caudal de agua, lo que lamentablemente no ha permitido resolver esta presunta desgracia, no obstante el operativo de rastreo se mantiene y se ha solicitado además a la empresa hidroeléctrica (Puntilla) la disminución del caudal".
Los trabajos subacuáticos se han llevado a cabo con personal especializado de los grupos Gersa, de Bomberos de Quillón y Coihueco, personal del GOPE de Carabineros de Concepción, y en el lugar también trabajan efectivos de la Sección de Investigación Policial (SIP) de Carabineros de Yungay.
La zona de búsqueda está debajo de un saltillo que tiene cerca de 40 metros de altura, por lo que se produce un remanso y fuertes torrentes dentro de sectores pedregosos, siendo éste el principal obstáculo que han tenido los rescatistas.
