El Tribunal de Garantía de Rancagua decretó este martes arresto domiciliario total y arraigo nacional para los 10 sujetos acusados de cavar un túnel de 15 metros hacia una bóveda de Prosegur ubicada en el centro de esa ciudad, en la Región de O'Higgins.
La jueza Jessica Bascuñán estimó que el delito configurado en este hecho era de robo en lugar habitado en calidad de tentativo, y no en calidad de frustrado, como definía la Fiscalía.
Ante la medida, el jefe fiscal de Rancagua, Javier Von Bischoffshausen, envió un recurso de apelación a la Corte de Apelaciones, dado que el Ministerio Público pedía la prisión preventiva debido a que, a su juicio, los imputados constituían una banda de asociación delictual.
"Es tal el nivel de sofisticación que, para evitar (levantar) las alertas, (los sujetos) ocupaban más de un vehículo de la misma marca, del mismo color y del mismo modelo. Además de aquello, tenían distintas placas patentes a disposición" para no causar sospechas, de acuerdo con el persecutor.
En esta línea, una de las placas "que portaban los imputados al momento de la detención, es el mismo número de placa patente que el mismo día fue detenido en la Región Metropolitana otro robo en lugar no habitado", lo que, según el fiscal, "permite acreditar la presencia de una organización criminal".
De este modo, la banda autodenominada "Pan con Chancho" -que tenía creado un grupo en WhatsApp desde hace cuatro meses para llevar a cabo el robo de 24 mil millones de pesos- seguirá en la cárcel hasta que la Corte resuelva la apelación del Ministerio Público.
