Hasta el frontis del Hospital Clínico de Viña del Mar llegaron este jueves integrantes de la Asociación de Enfermeras (Asenf) de la ciudad para protestar tras el suicidio de su colega Vanessa Araya, respecto de quien se sostiene que fue víctima de acoso laboral.
En el lugar, Gloria Díaz, secretaria de Asenf Viña y directora ejecutiva de la Federación Nacional de Asociaciones de Enfermeras (Fenasenf), pidió que el caso de Vanessa sea investigado por una entidad externa al centro asistencial en el que trabajaba.
"Esperamos que se genere una investigación profunda y oportuna en el menor plazo posible, pero no solamente de la clínica", señaló Díaz.
"Esperamos, por algo lógico, que no sea la misma clínica la que inicie la investigación: se tiene que hacer presente al menos la Inspección del Trabajo, los tribunales laborales; no puede ser la clínica juez y parte. Esperamos que haya coherencia", agregó la dirigente.
"EL EMPLEADOR DEBE ENTREGAR AMBIENTES SEGUROS"
En su opinión, hasta el momento en este caso "hay una tema que nadie ha tocado, que es la accidentabilidad del trabajo: si se logra determinar que la muerte es con ocasión del trabajo, me imagino que las mutualidades también deben hacerse presente".
"El artículo 184 del Código del Trabajo es enfático en decir que todo empleador debe resguardar las medidas para que sus trabajadores estén en ambientes libres y seguros para la vida y salud. Acá fallaron todos los eslabones de la cadenas", apuntó la líder gremial.
Consultada la Seremi del Trabajo por si ha iniciado algún proceso investigativo de oficio o ante denuncias, aún no ha proporcionado respuesta.
