Una resolución, presentada por Santiago, lamentó que Londres y Buenos Aires no hayan reiniciado las negociaciones por la soberanía de las islas.
El Comité de Descolonización de la ONU lamentó este miércoles que la "prolongada controversia" sobre la soberanía de las Islas Malvinas aún no se haya resuelto, e hizo un llamamiento al Reino Unido y Argentina a reanudar las negociaciones.
Así consta en la resolución que adoptó por consenso el Comité de Descolonización de la ONU, que desde hace años trata de impulsar el diálogo entre los dos países para encontrar una "solución pacífica, justa y duradera".
La resolución fue presentada por Chile, que este miércoles defendió la postura de Argentina en la disputa de ese territorio, que le perteneció desde su independencia, en 1816, hasta que fue ocupado por las fuerzas militares británicas en 1833.
Lo mismo hizo el representante de Brasil, en nombre de los 19 estados que forman parte del Grupo de Río, y Paraguay, por los países miembros del Mercosur y de los estados asociados.
El Comité de Descolonización hizo constar que, 40 años después de que la Asamblea General de la ONU aprobara, en 1965, una resolución tratando de promover el diálogo entre Argentina y el Reino Unido, aún no se haya llegado a un acuerdo.
Varios países atribuyeron este estancamiento a la falta de voluntad del Reino Unido, en tanto que Argentina ha hecho lo posible para lograr un acercamiento, según dijo en la sesión el ministro de Relaciones Exteriores argentino, Rafael Bielsa.
El canciller explicó que en 1989, con miras a reanudar las negociaciones sobre la soberanía, ambos países comenzaron a adoptar acuerdos de entendimiento sobre cuestiones prácticas relacionadas con el territorio en disputa.
Así, llegaron a acuerdos sobre medidas de confianza en el ámbito militar, en conservación de recursos pesqueros, exploración y explotación de hidrocarburos, y en acceso y comunicación por vía aérea a las islas.
Argentina, dijo Bielsa, ha tratado con estos acuerdos, de "crear una situación propicia para reanudar las negociaciones hacia una solución justa, pacífica y definitiva de la controversia".
Pese a ello, denunció que el Reino Unido "continúa realizando actos unilaterales que contrarían el espíritu de cooperación expresado en los entendimientos provisionales y violan la resolución 31/49 de las Asamblea General de la ONU".
Esta resolución insta a las partes a abstenerse de introducir modificaciones unilaterales en la situación mientras se resuelva la controversia.
Bielsa denunció que Gran Bretaña, en los últimos años, ha realizado actividades de prospección sísmica de hidrocarburos, ha adjudicado licencias para la explotación de minerales, ha seguido vendiendo licencias de pesca en la zona disputada, y no ha colaborado con las medidas de confianza en el ámbito militar.
A ello se unen otras iniciativas británicas dirigidas a "otorgar a las islas un estatus que no tiene", como ha sido la inclusión de las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur en el texto del Tratado Constitucional de la Unión Europea.
En la sesión tomaron la palabra dos habitantes de las Malvinas, descendientes de colonos británicos, y firmes defensores de la pertenencia de ese territorio al Reino Unido.
Stephen Luxton, miembro del Consejo Legislativo de las Malvinas, se refirió a la invasión de la isla por el Ejército argentino en 1982, y dijo que, si bien el gobierno actual "es democrático, la esencia de las posturas no ha cambiado, salvo que la agresión militar no forma parte de sus planteamientos". En su opinión sigue habiendo la misma "hostilidad".
"Si el gobierno argentino fuera verdaderamente democrático, aceptaría nuestra voluntad, que es la de pertenecer a Gran Bretaña como un territorio autónomo de ultramar. Somos británicos porque queremos serlo", añadió.
Por su parte, Bielsa reaccionó con dureza cuando escuchó la comparación del actual gobierno argentino con el de la dictadura militar, y expresó: "Es una falta de respeto que no voy a dejar pasar por alto". (EFE)
