El canciller subrogante dijo que dos militares que se desempeñaron en la embajada chilena en Buenos Aires entre 2006 y 2007 habrían sido vinculados al caso de supuesto fraude con autos diplomáticos.
La cancillería chilena descartó este viernes en Santiago que el embajador en Argentina, Luis Maira, esté vinculado a un presunto fraude con la comercialización de automóviles ingresados en ese país para uso diplomático.
"Quiero destacar que en caso alguno el embajador Luis Maira está bajo sospecha de alguna irregularidad", afirmó a los periodistas el canciller en funciones, Alberto Van Klaveren.
La justicia argentina investiga a catorce embajadores, varios de ellos de países latinoamericanos, por presuntos casos de contrabando y violación de normas sobre comercio de automóviles que involucran a unos 40 diplomáticos extranjeros.
"No está involucrado (Maira) en la investigación", enfatizó Van Klaveren y agregó: "él mismo (embajador) no ha hecho nunca uso de una franquicia para la adquisición de un automóvil en Argentina".
Explicó que Luis Maira fue mencionado en la investigación porque es jefe de la misión diplomática chilena en Argentina.
Van Klaveren reconoció, sin embargo, que dos militares que se desempeñaron en la embajada entre 2006 y 2007 habrían sido vinculados al caso.
"Aparentemente, este caso afecta a dos antiguos funcionarios de la embajada nuestra en Buenos Aires que no eran, además, funcionarios del Servicio Exterior de Chile", dijo Van Klaveren.
Agregó: "se trataría de un suboficial y un antiguo agregado militar. El agregado militar está en retiro en estos momentos y se trataría de una operación relacionada con vehículos que ellos adquirieron", subrayó.
Señaló que ambos se encuentran en Chile y que "aparentemente la adquisición de los vehículos se hizo cumpliendo toda la normativa argentina. Lo que sucedió después con los vehículos, es algo que tendrá que investigar la justicia argentina", indicó.
El canciller en funciones dijo que sobre el tema la propia embajada elaboró "un completo informe" y recalcó: "no hay ninguna sospecha de malas prácticas" con la representación chilena en el vecino país. (EFE)
