El ministro alertó sobre la "situación poco clara" de los otrora uniformados, pues no están protegidos por la Convención de Ginebra y si son heridos, retornan al país por atención.
El ministro secretario general de la Presidencia, José Antonio Viera-Gallo, fue categórico en afirmar que los ex uniformados que desarrollan labores de seguridad en Irak son mercenarios, según consignó una nota oficial.
Viera-Gallo recordó que Chile tuvo una postura clara sobre la invasión de Irak en Naciones Unidas (ONU), al decir no al envío de tropas internacionales para derrocar a Sadam Hussein, independientemente de que se trataba de un dictador.
"Paradojas de la vida, hoy hay cerca de mil chilenos que están defendiendo la seguridad privada en Irak", recalcó.
"Son mercenarios, una palabra fea, una palabra sucia, quiere decir soldados que son pagados y contratados por empresas privadas y llevados a Irak con promesas de buena paga y al mismo tiempo con la idea de que van a defender la seguridad de empresarios o de embajadas o de alguna residencia o barrio", dijo el ministro.
Y sin embargo están involucrados en la guerra en Irak, advirtió, agregando que se trata de "una guerra sucia que se hace en base a actos violentos, a atentados terroristas y a represiones encarnizadas. No hay fronteras claras entre amigos y enemigos", subrayó.
Dijo, asimismo, que el estatuto jurídico de estos chilenos no es claro, pues no están protegidos por la Convención de Ginebra y al mismo tiempo indicó que si son heridos viajan a Chile para pedir atención en el Hospital Militar o el Hospital de Carabineros.
"Es una situación poco clara", sostuvo Viera-Gallo, quien recordó que un grupo de Naciones Unidas, preocupado del tema de los mercenarios, visitó el país la pasada semana para llamar la atención sobre esta situación y hacer que Chile pueda suscribir la Convención Internacional en contra de los mercenarios.
El ministro indicó que de esta manera se puede prohibir en la legislación "categórica y tajantemente que este tipo de empresas privadas que tienen sede a veces en países desarrollados puedan reclutar, a veces engañar, a veces ilusionar a jóvenes chilenos para llevarlos a pelear guerras que no son de ellos", sentenció. (EFE)
