Mandatario se desplazará a Perú para firmar el acuerdo del Pacífico con México y Colombia.
José Antonio García Belaúnde dijo que la visita no tiene implicancias a nivel electoral.
Sólo cuatro horas permanecerá en Lima el Presidente Sebastián Piñera, quien viajará este jueves al Perú para la firma de acuerdos, en una visita que para el canciller José García Belaúnde representa que sí hay visiones comunes de desarrollo.
El Mandatario sostendrá una reunión de trabajo y un posterior almuerzo, tras el cual junto a los presidentes de México, Colombia y Perú sellarán el acuerdo del Pacífico, para fortalecer la integración en el área.
El jefe de Estado no tiene agendada ninguna reunión paralela o actividad que pueda cruzarse con el debate interno de cara a la segunda vuelta presidencial, donde lidera las encuestas el candidato Ollanta Humala.
Esta circunstancia no es vista como un impedimento al viaje para la comisión de Relaciones Internacionales del Senado. Para Jorge Pizarro (DC), "tiene que ver con una propuesta de acuerdos entre países del Pacífico para enfrentar fundamentalmente el desafío del comercio con Asia y me parece importante".
"No hay que olvidarse que las relaciones son entre los estados, entre los pueblos, las naciones: los Gobiernos son coyunturales, las personas pasan así que si no hay involucramiento en la campaña interna (...) me parece razonable que vaya", dijo Pizarro.
De la misma postura es el UDI Hernán Larraín, quien indicó que "nuestro Gobierno tiene que velar por los intereses permanentes de Chile" y en ese propósito una visita para firmar un acuerdo de este tipo "es simplemente muy saludable".
Antes de viajar a Perú, el jefe de Estado participará la tarde de este miércoles en una asamblea de la Asociación de Radiodifusores de Chile (Archi) en Iquique, y para mañana jueves tiene previsto anunciar un protocolo en salud, y luego emprender viaje.
Hoja de rutaDesde el gobierno peruano, el canciller José Antonio García Belaúnde valoró en diálogo con Cooperativa la llegada de Piñera, apuntando que esta que "no es una visita bilateral que podría ser considerada en medio de un proceso electoral y que pertenece a otras implicancias".
El Mandatario "viene con otros dos presidentes más, viene a hacer un proceso de integración que es un punto de inicio para la negociación", y para el canciller, lo que hace difícil el camino en paralelo no son las diferencias entre vecinos, "sino las visiones que puedan tener diferentes" en temas de desarrollo y manejo económico.
