La iniciativa inició su segundo trámite, al ingresar a la Comisión de Salud de la Cámara Alta.
Ejecutivo pretende "propiciar el debate".
Este martes el Gobierno ingresó la iniciativa a la Comisión de Salud del Senado, dando inicio al segundo trámite.
El Gobierno decidió no dar urgencia al proyecto de ley que despenaliza el aborto en las causales de riesgo de la madre, inviabilidad fetal y por violación, el cual ingresó este martes a la Comisión de Salud del Senado, dando inicio a su segundo trámite legislativo.
Con la presencia de cuatro ministros de Estado, el Ejecutivo explicó la iniciativa a los cinco parlamentarios de la instancia y detalló por separado la causal de violación, que, en el papel, es la más difícil de aprobar.
La decisión de no imponer urgencia al proyecto tiene que ver con "propiciar el debate", con los que además no se agilizará el trámite y los parlamentarios de la Comisión de Salud podrán tomarse el tiempo que estimen conveniente.
"El proyecto ha entrado sin urgencia, yo quiero reconocer en eso la disposición del Ejecutivo a dar el tiempo necesario para hacer un debate que esperamos sea con respeto a las distintas miradas, que permita además incorporar elementos al análisis, a mejorar el texto que ha llegado desde la Cámara de Diputados", dijo la presidenta de la Comisión de Salud del Senado y presidenta de la DC, Carolina Goic.
El tiempo estimado de debate solo en esta instancia podría llegar a cinco o seis meses, y aún no hay un conteo de cuantos expositores estarán antes de la votación. De hecho, un senador de oposición tiene una lista de 120 invitados, por lo que esto se podría alargar más de lo presupuestado.
"Yo creo que estamos empezando un camino, en el transcurso de esto vamos a ir viendo los detalles del proyecto, pero hay un tema que es importante que se sepa: acá se está proponiendo que se apruebe una interrupción del embarazo sin límite de edad gestacional, o sea, perfectamente se podría interrumpir un embarazo porque se diagnostica una malformación congénita de manera tardía a las 25 a 26 semanas y en esos casos lo que se hace es una inyección al feto para que muera y después inducir un parto", manifestó a su turno la senadora UDI Jacqueline van Rysselberghe.
Senadores se quieren tomar sus tiempos
Para el Gobierno el proyecto debería estar listo este año, pero los senadores se quieren tomar sus tiempos y se debe considerar que el Ejecutivo aún no tiene los apoyos suficientes para dar luz verde al proyecto.
El senador del PPD, Guido Girardi, sostuvo que "una mujer, siempre, a cualquier evento, y particularmente habiendo una violación o un embarazo inviable, tiene que tener derecho a decidir, o si no es ningunearla, transformarla en una cosa, que ni siquiera es capaz o puede tomar decisiones respecto a su propia vida".
"Eso es una actitud machista, autoritaria, que creo que es inaceptable a esta altura", añadió el PPD.
Además, sostuvo que "si en Chile de verdad se persiguiera el aborto, y hubiera una unidad de la PDI que persiguiera el aborto y hubiera una unidad del Ministerio Público que persiguiera el aborto, les aseguro que esa legislación absurda de condenar a la cárcel a mujeres que toman decisiones por interrumpir el embarazo por ejercer un derecho humano, particularmente por estas causales, no duraría ni un solo día si mujeres pertenecientes a la elite tuvieran que desfilar por las PDI y por los Ministerios Públicos".
Algunos parlamentarios tienen temor que el debate se eternice, no solo pensando en la postura de algunos senadores, sino que también la Comisión de Salud también tiene otros proyectos como la nueva ley de fármacos.
La instancia, conformada por los senadores Carolina Goic (DC), Jacqueline van Rysselberghe (UDI), Francisco Chahuán (RN), Guido Girardi (PPD) y Fulvio Rossi (PS), asegura que propondrá sesiones adicionales para no dilatar tanto el proyecto.
