En la víspera las conversaciones en el Congreso se extendieron hasta altas horas de la noche.
El Ejecutivo prevé dejar cuatro aspectos de la reforma para que se resuelvan en comisión mixta.
La ministra del Trabajo, Ximena Rincón, y su par de Hacienda, Rodrigo Valdés, sostuvieron ayer intensos diálogos con los legisladores.
Hasta última hora de la noche del martes varios ministros de Michelle Bachelet trabajaron en el Congreso buscando comprometer los votos de los parlamentarios de la Nueva Mayoría para las últimas indicaciones incluidas en el "Proyecto que Moderniza las Relaciones Laborales"; la reforma laboral.
La apuesta del Ejecutivo es dejar aprobadas durante este miércoles las "adecuaciones necesarias" en la Cámara de Diputados y enviar a comisión mixta otros cuatro aspectos de la iniciativa que aún generan división en el oficialismo.
En un momento de la tarde del martes el PS pidió explorar un acuerdo y dejar la votación para abril, pero La Moneda decidió mantener la urgencia para el trámite de la iniciativa.
"Nosotros estamos trabajando para sacar el proyecto dentro del menor tiempo posible. Ustedes saben que ya es casi un hecho que habrá comisión mixta; eso significa que tenemos que esperar a la vuelta de la semana distrital para que se constituya y luego tiene que ser votada en ambas cámaras", pero "si están las condiciones, por cierto vamos a votar; estamos trabajando en eso", dijo el ministro vocero de Gobierno, Marcelo Díaz.
Alinear al oficialismo
La sesión de este miércoles en la Cámara Baja está programada para las 10:30 horas y las votaciones serán alrededor de las 14:00, pero no se descarta que, eventualmente, se pueda convocar a una sesión extraordinaria para continuar el debate en la tarde.
Se espera que el Gobierno presente esta mañana a las bancadas de la Nueva Mayoría un documento con una fórmula definida para resolver los puntos que irán a comisión mixta.
"El Ejecutivo ha reevaluado considerar cuatro aspectos fundamentales de la reforma para incorporarlos en el protocolo de la comisión mixta, que son: primero, la negociación de los sindicatos interempresas obligatorio para el caso de las medianas y grandes empresas; segundo, el concepto de huelga pacífica, que ha traído distintas interpretaciones y que tiene que ser eliminado; tercero, lo que implica la subcontratación, cuando trabajadores ya sea de la misma empresa en huelga o una tercera empresa, terminan contratando a esos trabajadores que estaban en huelga para trabajar en la misma empresa madre; cuarto, los temas de información dentro de la negociación", señaló el jefe de bancada de diputados socialistas, Juan Luis Castro.
"Se están conversando textos de solución respecto a los temas respecto de los cuales hay algún tipo de diferencia de interpretación y, a partir de esos textos, esperamos que sean todas las bancadas de la Nueva Mayoría las que, mayoritariamente, respalden cada una de las indicaciones (...), dentro de las que están las adecuaciones necesarias", complementó ayer, pasadas las 23:00 horas, el jefe de bancada de diputados de la DC, Fuad Chahín.
Pese a estas declaraciones, el Partido Comunista sigue rechazando la figura de las adecuaciones necesarias. Incluso ayer diputados de la colectividad marcharon en Valparaíso junto a la CUT exigiendo "una reforma laboral sin letra chica".
