"Tomamos todos los resguardos, porque la isla es muy frágil", dijo Pedro Edmunds Paoa.
La ínsula espera la llegada de al menos 2.800 turistas.
Isla de Pascua se alista para el 11 de julio próximo, a raíz del eclipse solar que se generará al oriente de la Polinesia, dejando en penumbras durante cuatro minutos el territorio insular, que espera recibir a centenares de turistas.
El gobernador Pedro Edmunds Paoa dijo que alistan para recibir a unos 2.800 turistas, entre ellos científicos y astrónomos de todo el mundo, por lo que se están tomando resguardos para cuidar la seguridad de las personas, así como de restos arqueológicos.
"La isla se está preparando hace bastantes meses, en términos de infraestructura, velar por la seguridad pública. Hemos tomado todos los resguardos, porque la isla es muy frágil, tiene muchos restos arqueológicos que hay que cuidar", explicó la autoridad en Una Nueva Mañana.
El eclipse provoca gran expectación entre la población isleña y los turistas que llegarán, quienes no sólo le han dado un carácter científico al evento, sino que también espiritual.
"Lo atractivo de este evento es más por el lado de la connotación espiritual y que el mundo se la ha dado, pensando que en la isla hay una cultura muy especial, hay un legado de nuestros ancestros que ha demostrado al mundo una magia, que son nuestros moais y eso ya es atractivo", agregó Edmunds Paoa.
Asimismo, el gobernador indicó que "millones de personas en el mundo observan la isla como un centro de energía positiva y con el hecho del eclipse, mucha gente quiere llegar".
