La sentencia se basó en el derecho de la libertad de expresión y en que las imágenes no iban destinadas a atacar al Islam, sino a los integristas que profesan esa religion.
El Tribunal Correccional de París absolvió este jueves a la revista satírica y laica Charlie Hebdo del delito de injurias con base religiosa por haber publicado tres polémicas caricaturas de Mahoma, en febrero de 2006.
El tribunal consideró que los dibujos del profeta del Islam no son constitutivos del delito de injurias, en contra de lo que mantenían las dos organizaciones musulmanas demandantes.
Las caricaturas objeto de litigio eran tres: una con Mahoma con un turbante del que salía la mecha de una bomba, otra en el profeta pedía a los terroristas que no se inmolasen porque ya no quedaban más vírgenes en el paraíso y la tercera en la que se lamentaba por ser "amado por tontos".
Las dos primeras habían sido publicadas previamente, en septiembre de 2005, por el diario danés Jyllands-Posten, mientras que la tercera era obra del francés "Cabu", un dibujante habitual de Charlie Hebdo.
La sentencia pronunciada por la Sala 17 del Tribunal Correccional de París es acorde con la requisitoria de la Fiscalía.
El pasado 28 de febrero, el Ministerio Público había pedido la absolución del director del Charlie Hebdo, Philippe Val, al considerar que la publicación de esas caricaturas era conforme al derecho de la libertad de expresión y que no atacaban al Islam sino a los integristas.
La defensa de Val, quien también había pedido la absolución, afirmó que nunca hubo intención de herir a nadie y subrayó que Francia es un país laico donde la libertad de expresión es fundamental.
Pero las entidades musulmanas demandantes, la Unión de Organizaciones Islámicas de Francia (UOIF) y la Gran Mezquita de París, no estaban de acuerdo con esa lectura.
Por ello, pidieron que se reconociese el delito de injurias con base religiosa, penado con hasta seis meses de cárcel y multa.
Esta sentencia es una de las primeras en Europa en tratar directamente la controversia surgida tras la publicación de las caricaturas de Mahoma inicialmente en Dinamarca.
Esa primera publicación provocó reacciones virulentas en países musulmanes y un boicot de los productos daneses, y de hecho derivó -entre otras acciones- en la quema de varias embajadas en Siria, entre ellas la chilena, ubicada junto a legaciones escandinavas en Damasco. (EFE)
