Cómo enfrentar el peak del virus sincicial en los niños

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Autor: Cooperativa.cl

No sacar a los lactantes a espacios cerrados con aglomeración de personas.

Evitar la contaminación intradomiciliaria como el humo del tabaco.

Hacer un lavado de manos riguroso por parte de la persona que cuida al bebé.

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Autoridades y especialistas han pronosticado un importante aumento de las enfermedades respiratorias producto del virus sincicial para esta semana y la próxima.

Conocer los síntomas y saber qué hacer es la clave para evitar complicaciones.

El virus respiratorio sincicial (VRS) es una causa frecuente de infección del sistema respiratorio en humanos. Típicamente se presenta en brotes que ocurren durante varias semanas en el otoño y el invierno.

Si bien los niños menores de dos años presentan síntomas más severos, la enfermedad también afecta a individuos de todas las edades.

"En climas templados como el nuestro, el VRS se presenta como una enfermedad estacional, que aparece en brotes epidémicos cada invierno y que pueden durar hasta cinco meses. Prácticamente no circula en otras épocas del año", explica la doctora Verónica Morales, docente de la Escuela de Medicina de la U. Andrés Bello. 

Vías de contagio

La puerta de entrada del virus a un individuo puede ser la nariz, la boca o los ojos.

El virus se contagia a través de secreciones respiratorias que son expelidas en gotas de diversos tamaños al hablar, llorar, estornudar o toser.

Las manos u objetos que han estado en contacto con secreciones respiratorias de un paciente infectado también sirven de vehículo de transmisión.

El virus sobrevive en el ambiente y en objetos por horas.

Síntomas de alerta

Los padres deben estar atentos a estos síntomas:

  • Dificultad para respirar y/o alimentarse.
  • Tos agobiante con cianosis (coloración azul) en la cara, principalmente alrededor de la boca.
  • Fiebre persistente después de una semana.
  • Hundimiento de las costillas.
  • Rechazo de la alimentación.
  • Silbidos en el pecho al respirar.

Consecuencias                              

"Cuando existe un brote epidémico de VRS en una comunidad, se observa un aumento en los casos de síndrome bronquial obstructivo (SBO) y neumonía en niños, aumentando así el número de hospitalizaciones de lactantes con infección respiratoria baja", comentó la doctora Morales.

"La severidad de los síntomas tiende a ser mayor a edades menores, y la mortalidad aumenta en pacientes de riesgo, especialmente en los lactantes con cardiopatías congénitas, displasia broncopulmonar por prematuridad, enfermedad neuromuscular o deficiencias del sistema inmunológico (cáncer, transplante, SIDA)", subrayó la profesional.

Prevención y Recomendaciones

"Se han realizado muchos esfuerzos para intentar prevenir la infección por VRS, sin embargo, aún no contamos con herramientas óptimas. La lactancia materna ofrecería cierta protección, y hay estudios que sugieren que los niños alimentados al pecho tienen menor riesgo de adquirir una infección por VRS que requiera hospitalización", destacó la pediatra.

Para prevenir la infección en el hogar, se deben lavar muy bien las manos antes de atender a los lactantes y evitar la exposición de éstos a personas con infecciones respiratorias agudas.

Esta misma medida es válida cuando existe un adulto mayor en el núcleo familiar.

Estas son las recomedaciones a seguir:

  • No sacar a los lactantes a espacios cerrados con aglomeración de personas, como por ejemplo cines y malls.
  • Evitar la contaminación intradomiciliaria, es decir, no fumar dentro de la casa, usar calefacción a gas o eléctrica.
  • Ventilar adecuadamente y todos los días el hogar del niño.
  • Hacer un lavado de manos riguroso por parte de la persona que cuida al bebé, sobre todo si hay personas adultas u otros niños enfermos en casa.
  • Acudir a médico en caso de presentar síntomas de alerta.

No hay una vacuna

Uno de las mayores dificultades para hacer frente a esta situación es que los antibióticos usados para tratar infecciones por bacterias, no son activos contra el VRS.

"Actualmente, no existe una vacuna disponible contra el VRS. Hace pocos años se cuenta con un medicamento inyectable que contiene anticuerpos específicos contra el VRS", señala la experta.

"Éste puede administrase a pacientes de alto riesgo, especialmente lactantes menores de un año, prematuros y con enfermedad crónica pulmonar o cardíaca", agrega.

El uso restringido a estos pacientes se debe a su alto costo y la corta duración de su acción protectora (cuatro semanas).

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