Soledad Barría detalló las medidas adoptadas a raíz de los casos no notificados de sida.
"Queremos recuperar la confianza de la comunidad", dijo.
La ministra de Salud, María Soledad Barría, dio a conocer las medidas de la intervención del Hospital de Iquique, que incluye la salida de su cargo de la directora del Servicio de Salud de la ciudad, Maritza López.
"A fin de reconocer el compromiso y la excelencia profesional con que muchos funcionarios del establecimiento realizan su labor, y para que su trabajo no presente una creciente desconfianza de la ciudadanía por la negligencia de unos pocos, se ha decidido solicitar la renuncia de la directora del Servicio, a quien agradecemos el trabajo realizado", fueron las palabras de Barría durante una conferencia en el Minsal.
En su reemplazo, Barría designó al doctor Joel Arriagada, del servicio de Valdivia, quien se hará cargo de la conducción del proceso, mientras que el doctor Jorge Santos, actual director del Hospital de Iquique, será el responsable de implementar todas las medidas definidas en los plazos correspondientes, incluida la revisión sistemática de los casos de VIH positivo.
Además, Barría recalcó que las subsecretarías de Redes Asistenciales y Salud Pública estarán en Iquique trabajando en terreno dos meses, respondiendo al eventual conflicto entre ambas, rechazado por Ricardo Fábrega.
La ministra señaló que, en el informe entregado por la subsecretaria de Salud Pública Jeanette Vega, se constató la existencia de fallas en la supervisión clínica, la ausencia de auditorías médicas, red en la capacitación del personal e insuficiencias en otras áreas, y comprometió en 15 días un programa de mejoramiento en el área de tratamiento y diagnóstico del VIH.
Respecto al tema del VIH en sí, Barría aseguró que de acuerdo a la ley, el ministerio no informará de sus identidades, pero "la propagación del virus depende, mas allá de toda medida de salud pública, de la responsabilidad de las personas, tanto de los portadores como de cualquier persona que tenga una vida sexual activa".
Dentro de las mejoras en la entrega de resultados, Barría detalló la cita fijada para recibir los resultados, búsqueda activa de quienes no retiren sus exámenes y el rediseño de la supervisión regional y nacional del seguimiento de pacientes, "para asegurar que todos sean notificados y todos tengan acceso oportuno al tratamiento, porque hoy día el sida es tratable".
Todas estas medidas, según Barría, están apuntadas a la "recuperación de la confianza de parte de la comunidad" en el servicio de salud, para lo que llamó una "nueva etapa de desarrollo del Hospital de Iquique", porque "queremos asegurar que hechos como los investigados no se vuelvan a repetir".
