El ingeniero uruguayo Miguel Brechner conversó con Cooperativa.cl.
El especialista está a cargo del Plan Ceibal, que lleva equipos a todos los niños.
Miguel Brechner es un destacado ingeniero uruguayo que desde 2005 es el responsable del Plan Ceibal, que entrega computadores portátiles a todos los alumnos de enseñanza primaria en ese país.
Este amante del fútbol, que espera ansioso el debut de su selección en Sudáfrica 2010, vino a Chile al seminario "De la tiza al clic", organizado por el Centro de Microdatos de la Universidad de Chile, el BID y el Ceppe (Centro de estudio de políticas y prácticas en educación).
Brechner conversó con Cooperativa.cl sobre el proyecto, que nació hace tres años en el país del río de la Plata, fruto de la idea de Nicholas Negroponte, del MIT, de revolucionar la educación a través de la computación.
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| Brechner está a cargo de Ceibal hace cinco años. |
"Pensamos el plan Ceibal como un plan de inclusión, equidad y de igualdad de derechos. Los impactos más importantes que vimos es cómo los niños se apropiaron de la tecnología, y en los padres, la necesidad de querer aprender", dijo, como declaración de principios.
"Los efectos se ven en toda la sociedad, de repente uno ve a los niños y a los padres donde hay señal, aprovechando para trabajar o hacer trámites, durante los fines de semana. Hay cientos de anécdotas de padres que han mejorado sus condiciones laborales", agregó.
¿Hasta ahora ha valido la pena la inversión?
-Estamos muy contentos. Hemos invertido el 5 por ciento del presupuesto de la educación primaria y creo que es de la mejor plata que hemos invertido. ¿Cuánto vale la recuperación de la autoestima de los niños y que adquieran nuevas habilidades? Es muy difícil de cuantificar.
¿Qué apoyo tiene el proyecto en Uruguay?
- Sobre el 90 por ciento, incluida toda la oposición. Fue el único proyecto que nadie cuestionó en la campaña electoral. Incluso, todos prometían hacerlo mejor.
-¿El tamaño de Uruguay les ha ayudado a realizar este plan?
- Lo de pequeño o grande no influye. Acá lo importantes es la decisión política de hacerlo. Si hubiesen sido 500 mil chicos, en vez de 300 mil, la diferencia era sólo presupuestaria. En Uruguay ayuda que la compañía telefónica sea estatal y que tenga una geografía plana. Nada más.
-¿Cuáles son los principales problemas que han enfrentado en estos tres años?
- Hay todo tipo de problemas: con el sistema educativo, para que entienda cómo subirse a este proyecto, que sepa que no viola su autonomía; tecnológicos, por falta de internet y luz en algunos barrios. Son los problemas que afectan a la sociedad, y que Ceibal desnuda.
Sobre cuánto invierte el gobierno oriental por cada alumno, Brechner dijo que "el gasto que estimamos por niño es de 75 dólares por año, unos seis dólares por mes (unos 3.200 pesos chilenos). En zapatillas los niños gastan más".
-¿Qué rol tienen los profesores en el proyecto?
-Se capacitan a través de varios canales. Al comienzo, los maestros tienen miedo porque los niños saben más que ellos. Queremos que el maestro les enseñe a pensar, a contextualizar, no que sepa todo. El maestro Wikipedia tiene que desaparecer. La enseñanza es recíproca.
"Hay que desmitificar la tecnología. El computador es una herramienta más. Por alguna razón, hay una mística alrededor de la computadora y las tecnologías de la información. No es muy distinto que prender o apagar la ampolleta. Hay que trabajar en la simplicidad", agregó.
-¿Qué preferencia de software tienen ustedes?
-Somos 'agnósticos', estamos usando Linux en enseñanza primaria porque la plataforma Sugar es muy buena. Pero si hay otra plataforma mejor para enseñanza secundaria, vamos a usarla.
-¿La revolución uruguaya es implementable en otros países de la región?
-Es implementable en cualquier lado, alcanza con que se tome la decisión política de hacerlo. Hay muchos países que están en igualdad de condiciones de Uruguay. Es mejor tener un proyecto ambicioso y llegar a la mayor cantidad de niños posibles.
