El fundador de Wikileaks volvió a reiterar que no violó las leyes estadounidenses.
Consideró las acusaciones en su contra como hostigamiento.
El fundador de Wikileaks, Julian Assange, insistió en que no cometió actos indebidos en la divulgación de documentos secretos de Estados Unidos, ya que nunca le pidió a alguien entregarle material confidencial.
Assange, en una entrevista con la cadena CBS que se exhibirá el domingo, negó haber instado a alguien a filtrar los secretos militares y diplomáticos de Estados Unidos.
Las declaraciones son en respuesta a la investigación penal que se lleva en Estados Unidos sobre la forma en que Wikileaks obtuvo los documentos. Assange señaló que la investigación es un acto de hostigamiento.
Los fiscales federales estadounidenses solicitaron detalles de las cuentas que tienen en Twitter Assange y el soldado Bradley Manning, un analista de inteligencia del Ejército que permanece detenido y es el único sospechoso de entregar la información confidencial.
El secretario de Justicia, Eric Holder, advirtió que cualquier persona que haya violado las leyes estadounidenses al hacer las filtraciones será juzgado.
