Presidente de Ecuador acusó contradicciones del Reino Unido en ambos casos.
"Ni siquiera se pone la garantía de no extraditarlo a un tercer país", sostuvo.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, fustigó la actitud de Reino Unido de no rechazar la extradición del fundador de Wikileaks, Julian Assange, y comparó su caso con el del dictador Augusto Pinochet, quien no fue extraditado a España en 1998.
Correa afirmó que "aquí podemos encontrar una contradicción: Mientras que a un criminal, acusado de decenas de muertes de ciudadanos europeos, miles de muertes de ciudadanos latinoamericanos, de decenas de miles de torturas -todos estos crímenes de lesa humanidad-, mientras a un criminal de esa calaña como Augusto Pinochet se negó su extradición a España por motivos humanitarios, a Julian Assange se dice que se tiene la obligación de extraditarlo".
"Ni siquiera se pone la garantía de no extraditarlo a un tercer país, hablemos claro, Estados Unidos donde no hay garantías de un proceso justo y donde existe pena de muerte y cadena perpetua por delitos políticos", aseveró.
El mandatario añadió: "Con todo respeto a Gran Bretaña, sí creo que existe ahí una clara contradicción y un claro doble estándar".
Julian Assange, de origen australiano, está refugiado en la embajada de Ecuador, país que le concedió asilo pero que no ha podido viajar al país latinoamericano debido a que si pone un pie fuera de la legación ecuatoriana arriesga ser detenido.
Esto debido a que Suecia lo requiere por un caso de supuesta agresión sexual, sin embargo, el propio Assange cree que esa es la excusa para extraditarlo a Estados Unidos donde lo buscan por la difusión de cables diplomáticos de distintas embajadas del país de América del Norte.
