Por Jennifer Maldonado
Enmarcado en la gira promocional de su octavo disco, "Sueños de un hombre despierto", Ismael Serrano dio paso al primero de sus cinco conciertos en Chile ante más de siete mil personas que, pasadas las 21:00 horas, vieron aparecer al cantautor de jeans, suspensores y camisa blanca sobre el escenario del Arena Santiago.
Con una escenografía que simulaba un ambiente portuario, el cantautor invitó al público a compartir una noche en un "Peumayen" (lugar soñado en mapuche), en el que –contó- salen los "barcos en busca de los sueños".
"Les vengo a presentar un manojo de temas que conducen a la esperanza, ese (Peumayen) es el espacio de encuentro que les proponemos esta noche (…) desde aquí salen los barcos buscando los sueños", dijo, al tiempo que abría los fuegos con "Somos", que fue seguida por "Sucede que a veces" y "Canción de amor y oficina".
Fue así como Serrano, Javier Bergia (percusión), Freddy Marugán (dirección musical, bajo y guitarra) y Jacob Sureda (teclados y bajo) hicieron gala de sus habilidades como músicos con un sonido impecable, que tuvo como escenario de fondo el lienzo de una playa y redes.
Entre canción y canción, el artista dio paso a un lúdico juego, en el que dialogó simpáticamente con Bergia y contó diferentes historias en las que reflexionó sobre el amor, el paso del tiempo y los encuentros inesperados.
Este juego introdujo cada canción del espectáculo –las que al principio fueron escuchadas sin mayor ovación del público-, entre las que destacaron "Sesión continua" y "Caperucita".
Sin embargo, fueron los éxitos "Vine del norte"- canción en que narra la historia de un español que se enamora de una chilena durante un viaje por el país y donde aprovechó la oportunidad para referirse al cierre del proceso sobre la muerte de Victor Jara y manifestar su apoyo a Joan Jara, viuda del músico y director de teatro- y "La Cigarra", de María Elena Walsh, los temas que se llevaron la mayor aclamación del público, que –agradecido- coreó a tono ambos temas y aplaudió sin descanso.
Fue así, como entre historias de amor y reflexiones, Serrano logró crear una atmósfera de íntimo encuentro con el público, con el que compartió risas y canciones, tanto de su nuevo disco, como las conocidas y -solicitadas a gritos- canciones "Ya vez" y "Ultimamente".
Pero no fue hasta el cierre del show, con la interpretación de "Casandra", el primer sencillo de su último material discográfico, que el público hizo sentir la fascinación por el artista.
Tras la despedida del cantautor, los asistentes eufóricos comenzaron a pedir el regreso al escenario de la banda formada por Serrano y sus tres músicos, que a petición de la fanaticada regresaron al escenario.
Fue entonces que el Arena Santiago despertó y al son de canciones conocidas como "Papá cuéntame otra vez", "Ya nada es lo que era" y "¿Qué andarás haciendo ahora", el público gozó y manifestó su admiración por el cantautor, que regresó tres veces más al escenario.
"Duermes" fue la canción elegida por Serrano para poner fin a un cálido encuentro, en el que artista se paseó durante más de tres horas por sus ocho discos.
La cita se repetirá este 25 de mayo en Talca, el 26 en Valparaíso, el 28 de mayo en Temuco, para rematar el 30 en Concepción. (Cooperativa.cl)