La seremi de Salud Metropolitana, Rosa Oyarce, encabezó una fiscalización al Mercado Central en las vísperas de Semana Santa, fiesta religiosa en la cual los fieles acostumbran sólo a comer alimentos marinos.
La visita la hizo en virtud de no repetir la cifra de 33 intoxicados por ingerir pescados y mariscos en mal estado durante la misma celebración en el 2011.
En esa línea, Oyarce aconsejó asegurarse de que los pescados tengan las agallas rojas y los ojos brillantes y que los mariscos se cierren si se les da un pequeño golpe.
"Lo importante es que el pescado esté en condición tersa, duro al tocarlo, ojos brillosos, agallas rojas; y en el caso de los mariscos, que al tocarlos se cierren. Con un golpecito pequeño, deben cerrarse rápidamente", indicó.
Además, la autoridad de Salud dijo que es necesario llevar los productos rápidamente al hogar luego de adquirirlos para que de esta forma no pierdan la cadena de frío y se mantengan frescos para no arriesgar enfermedades.
El alcalde de Santiago, Pablo Zalaquett, quien acompañó a la Seremi durante la fiscalización, aseguró que durante el año se han incautado 920 kilos de pescado en malas condiciones en el tradicional recinto ubicado en la comuna.
"Hasta la fecha hemos decomisado 920 kilos de pescados y mariscos en el Mercado Central y hecho cuatro sumarios sanitarios, Lo seguiremos haciendo para darles garantía a los consumidores", expresó el edil.