El grupo dirigido por Rodrigo Jordán y liderado por Andrónico Luksic, llegó a la cima de la montaña más alta del mundo para convertirse en la primera expedición que lo logra durante la presente temporada.
Justo cuando se cumplen 12 años desde que el primer grupo nacional alcanzara la cumbre del Everest el 15 de mayo de 1992, nuevamente una expedición nacional ingresó a la historia del montañismo al llegar al punto más alto de la montaña este sábado, cerca de las 12:50 horas de Nepal (02:50 horas de Chile, 06:50 GMT).
Rodrigo Jordán, quien integró la delegación que logró el objetivo en 1992, fue el director de la expedición que estuvo integrada por Ernesto Olivares, Andrónico Luksic, Misael Alvial y Eugenio Guzmán.
El primer integrante de la delegación nacional en hacer cumbre en el monte de 8.850 metros fue el experimentado Olivares, seguido por Luksic, Alvial y Guzmán, según informó desde el campamento base Rodrigo Jordán.
"Están todos muy bien. No tuvieron mayores problemas para descender al Campamento 4, donde se encuentran ahora reponiéndose del esfuerzo que implica atacar la cumbre más alta del mundo", señaló Jordán.
"La primera instrucción que les di tras alcanzar la cumbre fue que bajaran de inmediato, porque era muy tarde (la llegada a la cima se esperaba cerca de las 10:00 hora local) y la mayoría de los accidentes suceden en la bajada, por eso les solicité descender luego para minimizar el riesgo, además que estaba apareciendo una neblina muy espesa", agregó el encargado de las tareas logísticas.
La exitosa expedición, que deja a Chile como el país sudamericano con mayor número de escaladores que han alcanzado la cumbre del Everest, tuvo sus primeros pasos el 27 de diciembre de 2002.
Desde marzo de este año, y tras 57 días de intenso trabajo en las inhóspitas alturas de los Himalayas, la labor de los cuatro escaladores y su equipo de apoyo permitió que la bandera chilena flameara por cuarta vez en la cima del Monte Everest.
La primera parte de la escalada se realizó en seis horas, donde se cargó oxígeno. Desde allí, la marcha continuó durante cuatro horas hasta la cumbre sur, y los siguientes pasos fueron más lentos con el objeto de hacer más segura la ascensión. La última etapa se completó en tres horas.
