El mandatario deploró las críticas que ha recibido el régimen en los últimos días por la situación de los DD.HH.
Asimismo, dijo que no cederá ante los disidentes que realizan huelgas de hambre.
El presidente de Cuba, Raúl Castro, afirmó este domingo que su país prefiere "desaparecer" antes que aceptar el "chantaje" que le hacen Estados Unidos y Europa mediante "manipulaciones" sobre la situación de los derechos humanos en la isla.
"Este país jamás será doblegado. Antes prefiere desaparecer, como lo demostramos en 1962", dijo el gobernante en alusión a la llamada "crisis de los misiles", el clímax de la Guerra Fría, que estuvo a punto de enfrentar militarmente a Estados Unidos y la Unión Soviética en octubre de ese año.
Castro recordó que Cuba no cedió "ni un milímetro" cuando Washington la apuntaba con sus armas nucleares y -según dijo- se disponía a invadir Cuba, ni tampoco cuando se desplomó la Unión Soviética, su principal aliado y proveedor.
"La vacilación es sinónimo de derrota. No cederemos jamás al chantaje de ningún país o conjunto de naciones, por poderosas que sean, pase lo que pase", agregó el general al clausurar en La Habana el IX Congreso Juvenil del Partido Comunista.
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| "Este país jamás será doblegado", advirtió el hermano de Fidel, que criticó a los "compañeros" que se "desesperan" pidiendo "cambios inmediatos" en la isla. (Foto archivo: EFE) |
Sobre la disidencia
Tampoco cederá Cuba, advirtió Castro, al "chantaje inaceptable" de los disidentes que se declaran en huelga de hambre para pedir la liberación de presos políticos enfermos, y reiteró la versión oficial de que aquellos son "delincuentes comunes", y si mueren es culpa suya y de quienes les apoyan.
"Si pretenden acorralarnos, sepan que sabremos parapetarnos", añadió, antes de denunciar las "increíbles campañas mediáticas" del "enemigo" y "tergiversaciones" cometidas por diversos gobiernos, organismos y personalidades tras la muerte, en febrero, del disidente preso Orlando Zapata al cabo de una huelga de hambre de 85 días.
El general -que ejerce la presidencia desde 2008- dijo que le "repugna" el "doble rasero" de los países europeos que critican los derechos humanos en Cuba cuando allí maltratan a los inmigrantes y reprimen las manifestaciones incluso a balazos, y acusó además a "la extrema derecha española y el imperio americano" de seguir buscando la "destrucción de la revolución" cubana.
Crisis económica
Por otra parte, el mandatario reiteró sus advertencias de los últimos años respecto de crítica la situación económica cubana, e insistió en que se gastan "millones y millones" en importar alimentos que se pueden cultivar en el país, mientras crecen las "ilegalidades" y la corrupción.
"Continuar gastando por encima de los ingresos significa comernos el futuro y poner en riesgo la supervivencia de la revolución", sostuvo, a la vez que criticó a los "compañeros" que se "desesperan" pidiendo "cambios inmediatos", sin tener en cuenta la cantidad de asuntos que él tiene por delante para asegurar un futuro a la revolución que encabezó en 1959 su hermano y antecesor, Fidel Castro, aún primer secretario del Partido Comunista.
