Proceso quedó inconcluso ante oposición de comunidades mapuche de La Araucanía
La mayoría de las comunidades de Malleco y Cautín rechazaron la consulta y llamaron a no volver a insistir en el proceso.
La consulta indígena terminó su primera etapa y el Gobierno evalúa su continuidad.
El proceso quedó inconcluso ante el rechazo mayoritario de las comunidades indígenas de la llamada macrozona mapuche.
Desde el Gobierno se informó que el nuevo ministro de Desarrollo Social, Sebastián Sichel, y su equipo están evaluando cómo van a continuar el proceso, más aún tomando en cuenta que las comunas de Ercilla y Galvarino no fueron consultadas por temor a que se registraran incidentes con las comunidades ubicadas en la "zona roja" de Malleco.
La senadora de Evópoli por La Araucanía, Carmen Gloria Aravena, indicó que el Gobierno se ha dado un plazo de 45 días para volver con un nuevo proceso ya que hay "temas que generan ruido".
Por su parte el diputado del PPD Ricardo Celis señaló que se han registrado gastos excesivos de dinero en un proceso que no llegó a ningún lado, agregando que "más o menos ya van gastado cerca de cien millones de pesos y el Gobierno insiste en seguir instalando un proceso que fue rechazado desde el principio".
Dirigentes mapuche llamaron a dejar de insistir en el proceso ya que no están dispuestos a conversar con el Gobierno materias que a su juicio sólo benefician negocios entre empresas forestales y particulares.
El nuevo asesor de Asuntos Indígenas del Gobierno, el ex diputado de la UDI Gonzalo Arenas, se encuentra analizando si hay o no garantías para volver con la consulta que en lo central busca acuerdos para modificar asuntos contradictorios que contiene la Ley Indígena, la cual fue promulgada en 1993 en Nueva Imperial bajo el Gobierno de Patricio Aylwin Azócar.
