El Oscar de Orson Welles fue vendido por 445 millones de pesos
El cineasta se llevó el galardón de Mejor Guión Original con "El ciudadano Kane".
Durante años esta estatuilla estuvo perdida.
El Oscar que obtuvo Orson Welles por el guión original de "El ciudadano Kane" se vendió en una subasta de la casa Nate D. Sanders, con sede en Los Angeles, por un precio de 861.542 dólares (unos 445 millones de pesos), informó el blog especializado Deadline.
El filme fue candidato a nueve Oscar, incluido el de Mejor Película, Mejor Actor y Mejor Director (ambos para Welles), pero sólo obtuvo el de Mejor Guión Original, un reconocimiento compartido con Herman J. Mankiewicz en 1941.
Welles se hizo con un premio honorífico de la Academia de Hollywood en 1971.
Algunos medios, como The Hollywood Reporter, apuntaban a que la persona que logró llevarse el Oscar fue el ilusionista estadounidense David Copperfield, un extremo que él mismo se encargó de desmentir en la red social Twitter.
Welles fue quien produjo la primera aparición televisiva de Copperfield, quien ya posee otros objetos relacionados con "El ciudadano Kane", considerada por algunos expertos como una de las mejores películas de la historia.
La cinta cuenta la vida del magnate de la prensa Charles Foster Kane, basada en la de la figura real de William Randolph Hearst, encarnado por el propio Welles en la película.
Copperfield fue una de las personas que trató de hacerse con el Oscar, según aseguró Nate D. Sanders, el propietario de la casa de subastas, quien explicó que esta estatuilla es una de las pocas que ha logrado venderse por un precio cercano al millón de dólares.
Durante años esta estatuilla estuvo perdida y la Academia de Hollywood concedió un reemplazo a la hija del cineasta, Beatrice Welles, mientras que el original había estado en manos del cineasta Gary Graver, director de fotografía de Welles, que trató de venderlo en 1994.
Al enterarse, Beatrice presentó una demanda en California para detener la venta y que el Oscar volviera al patrimonio de la familia, aunque posteriormente lo vendió en 2003 a la Fundación Dax, una entidad caritativa sin ánimo de lucro de Los Angeles.