Sindicato de La Polar: Tenemos claro que si la empresa quiebra nadie gana
Iván Campos instó al Sernac y a la firma a llegar a un acuerdo.
En Cooperativa, destacó que los ejecutivos "intentan darnos una tranquilidad que dura poco".
El presidente del Sindicato de Trabajadores de La Polar, Iván Campos, señaló en El Diario de Cooperativa que existe preocupación entre los trabajadores por la posible quiebra de la multitienda tras el avance de la demanda colectiva presentada en su contra por el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac).
"Y
o comparto lo que leí ayer, de que están todos tratando de esforzarse para ir al funeral de La Polar. Creo que lo que se tiene que lograr es aunar voluntades, nada más que eso. Ahí hay que ver cómo (proceder), no sé que más esperar. Todos tienen claro que si la empresa quiebra nadie gana", dijo Campos.
"No creo que haya alguna empresa que esté en condiciones de pagar esas multas", añadió.
El líder sindical enfatizó que "consideramos que verdaderamente hay clientes que se sintieron estafados por La Polar y deben ser compensados, debe hacerse justicia en ese punto, pero lo otro es buscar ese punto de equilibrio, ese punto intermedio donde la empresa siga funcionando
"Los mismos accionistas minoritarios entienden que si esto no es así, a lo largo no se va a poder sacar un peso, no se van a poder pagar las multas y nosotros nos vamos a quedar sin empleo", agregó.
"Nos tratan de transmitir tranquilidad"
"Nos hemos juntado con la nueva administración y nos han planteado que van a hacer todo lo que esté a su alcance, todo lo que sea posible para sacar a flote a la compañía, de que no quiebre. Como hay una contraparte, esa contraparte tendrá que sentarse a conversar con números, con cifras que sean reales", indicó Campos.
"En cuanto a nuestro empleo nos tratan de transmitir tranquilidad, una tranquilidad que dura poco. El otro día analizábamos si llegábamos al convenio judicial preventivo el 7 de noviembre, pero nuevamente con este tema de la demanda colectiva da pie atrás. No ha entrado ningún inversionista que quiera tratar de poner capital y levantar la compañía", explicó.
"Nadie va a venir a comprar una compañía que vale menos de 100 millones de dólares cuando corre el riesgo de pagar un máximo de 5 mil millones de dólares (con las multas)", sentenció.