Minsal acusó "situación de riesgo sanitario" por incendios forestales
La perspectiva para la semana es "preocupante", dijo el ministro Jaime Mañalich.
Explicó que legalmente no se pueden dictar alertas ambientales o preemergencias.
De forma colateral los grandes incendios forestales aumentan la posibilidad de contagio con virus hanta: "Verdaderamente tenemos un riesgo enorme para este verano", dijo Mañalich.
El ministro de Salud, Jaime Mañalich, advirtió que la ola de incendios forestales que afecta desde la Región de Valparaíso hasta la Araucanía y que ha mantenido cubierta de humo a la Región Metropolitana el fin de semana ha provocado un riesgo sanitario nuevo.
"Enfrentamos una situación de riesgo sanitario nueva en nuestro país", expresó Mañalich, destacando que a las 15:00 horas de este domingo había seis estaciones de monitoreo de la calidad ambiental en nivel "regular" y dos en "alerta".
"En relación a la calidad del aire la situación es bastante mala. Evidentemente no concurren las condiciones invernales de hacinamiento, bajas temperaturas y contaminación intradomiciliaria; hay mucha más vida al aire libre, pero los números de contaminación que hemos visto en algunas estaciones de monitoreo son bastante altas", dijo el secretario de Estado.
Mañalich indicó que se prevé que el control de los incendios en Melipilla tome aún algunos días, y si a eso se suma que hoy regresaban a la capital miles de personas que tomaron vacaciones por el año nuevo, la perspectiva para la semana es "preocupante".
"El efecto del material particulado -que es el más agresivo para la salud de la población- normalmente produce un efecto retardado, porque descompensa sobre todo a personas que sufren enfermedades respiratorias crónicas, como fibrosis quística, cáncer pulmonar, asma bronquial. Estas personas ven afectada su salud en los días siguientes", explicó.
No es posible dictar alertas ni preemergencias
Ante eso, el Minsal adoptó medidas a nivel de la red de atención: en la Asistencia Pública el 20 por ciento de las camas están desocupadas para internar a pacientes adultos que lo necesiten, y el Hospital San Borja-Arriarán tiene la mitad de su capacidad pediátrica disponible para cualquier eventualidad en niños.
El ministro Mañalich aclaró que no están dadas las condiciones para que el Gobierno decrete las usuales medidas de excepción que se adoptan en invierno, en episodios de alta contaminación.
"El Ministerio del Medio Ambiente y las Intendencias no tienen potestad legal para decretar en este período del año alertas ambientales ni preemergencias porque la ley estipula esas situaciones sólo entre mayo y agosto de cada año. De manera de que no hay manera legal de que la autoridad ambiental decretara en este momento una premergencia, por ejemplo", señaló.
Recomendaciones
Ante este panorama, el Ministerio entregó recomendaciones a la población para enfrentar los días venideros, que seguirán con contaminación.
"Aquellas personas que realizan actividad física a diario o los fines de semana, que disminuyan esta actividad o incluso que la suspendan si se mantienen las condiciones ambientales que hemos visto hasta ahora", dijo el subsecretario de Salud Pública Jorge Díaz.
"Nosotros vamos a ir informando permanentemente sobre la condición ambiental, pero también aquí las personas deben tomar una responsabilidad de autocuidado ante estas situaciones", señaló Díaz.
'Todo paciente que sufra una enfermedad respiratoria crónica y que utiliza medicamentos, que por ningún motivo abandone su tratamiento. Hay muchas personas con asma o una bronquitis crónica descuidan su tratamiento en verano, lo que en estas condiciones no es conveniente", continuó la autoridad.
"Riesgo enorme" con el hanta
Los incendios forestales que están afectando a seis regiones del centro y sur del país tendrán probablemente otro efecto cercano en la salud de la población. Tal como se vio hace dos veranos, el fuego en los bosques provocó la huida de animales silvestres hacia zonas habitadas. Entre ellos estaban los ratones colilargos, que son el vehículo de transmisión del virus hanta, y efectivamente esa temporada hubo un aumento de contagios.
"Eso, asociado a las condiciones de florecimiento de quila –que es el alimento de los ratones-, y la afluencia de veraneantes a los lugares donde hay hanta hacen pensar que verdaderamente tenemos un riesgo enorme para este verano", dijo Jaime Mañalich.
Durante esta temporada ya se ha detectado un aumento de 50 por ciento en la población de ratones colilargos, lo que gatilló una serie de medidas sanitarias, especialmente en la Región de la Araucanía. Entre ellas se reforzó la fiscalización de los campings para asegurarse que hubiera poda de matorrales, desrratización de instalaciones y otras acciones preventivas.
El mismo riesgo de aumento de hanta se prevé para las demás regiones del país donde ha habido contagios esta temporada, sumado a incendios forestales, como ocurre en Valparaíso, O'Higgins, Maule, Biobío y la Región Metropolitana, resaltó el Minsal.
Para prevenir el hanta
Para quienes salen de paseo o camping las recomendaciones son:
No internarse en matorrales o bosques, y circular sólo por senderos habilitados, una precaución especialmente importante en el caso de los niños.
- No recoger leña ni frutos silvestres (podrían estar contaminados con la orina de ratones infectados).
- Dejar bien guardados los alimentos en envases herméticos para no atraer ratones.
- Mantener la basura en recipientes cerrados, fuera del alcance de los animales.
- Acampar en lugares abiertos y preferir sitios de camping autorizados.
- Usar carpas con piso y mantenerlas cerradas para que no entren ratones.
- Si va a ir a una cabaña que ha estado sin habitar, ventílela por media hora antes de instalarse, y limpie las mesas, veladores y otras superficies con agua y cloro.
- Los habitantes o trabajadores rurales deben tener también cuidado en sellar y desratizar sus hogares y mantener ventiladas bodegas, leñeras o galpones. También deben mantener recortado el pasto alrededor de las viviendas, para que los roedores no se acerquen.
- El objetivo final es evitar exponerse al contacto con ratones o sus desechos, para no contagiarse con el virus.