Ex pareja insiste que Julio Cortázar murió de SIDA
La escritora y periodista Cristina Peri Rossi lo asegura.
El contagio habría sido a través de una transfusión de sangre.
Cristina Peri Rossi publicó un libro en 2001 donde postuló la misma teoría sobre la muerte de Cortázar.
Cuando se cumplen 30 años de la muerte del gran escritor argentino Julio Cortázar, ocurrida el 12 de febrero de 1984, la escritora y periodista Cristina Peri Rossi realizó controversiales declaraciones al diario trasandino Clarín, asegurando que el autor de "Rayuela" no murió de cáncer, como fue informado oficialmente, sino producto del SIDA.
"Julio Cortázar no murió de cáncer ni de leucemia como se especuló, sino que falleció de SIDA con la desgracia que le contagió la enfermedad a su querida esposa, Carol Dunlop. Ella murió primero, dos años antes de Julio, porque aunque era muchísimo más joven, le habían quitado un riñón", dijo Peri Rossi, quien conoció a Cortázar en 1973, siendo amigos hasta su fallecimiento, habiendo compartido incluso una relación sentimental.
Según ella, los médicos no pudieron en aquel momento diagnosticar la enfermedad al creador de "Bestiario", porque en aquel tiempo el virus aún era desconocido. El origen del contagio, en tanto, habría sido una transfusión de sangre realizada en Francia.
"El sida no se había identificado cuando Julio lo contrajo, era una enfermedad sin nombre. Consistía en un retrovirus no identificado. Lo contrajo porque sufrió una hemorragia estomacal en agosto de 1981 cuando vivía en el sur de Francia. Lo hospitalizaron y le hicieron una transfusión de varios litros de sangre, que después se supo, en medio de un gran escándalo, que estaba contaminada", aseguró Peri Rossi a Clarín.
Sangre contaminada
Según la amiga del autor, en los tiempos en que la transfusión fue realizada, aún no se realizaban análisis para descartar infecciones como el VIH. "Años después se supo que esa sangre, que venía de la Cruz Roja, estaba contaminada. Se produjo un gran escándalo que terminó con la destitución del ministro de Salud Pública. La sangre se compraba a emigrantes pobres. No se realizaban pruebas, análisis, porque la enfermedad, el SIDA, eran desconocidos".
Tal como ha sido perpetuado en la información oficial que existe sobre el artista, al principio los médicos y allegados a Cortázar pensaron que se trataba de cáncer. "La verdad es que la enfermedad que padeció Julio no estaba todavía diagnosticada, no tenía una denominación específica, se le llamaba "pérdida de defensas inmunológicas", agregó Cristina Peri Rossi.
El mismo mal, identificado como un retrovirus desconocido en aquel tiempo, habría causado la muerte en 1982 de su esposa, la también escritora y activista norteamericana Carol Dunlop.