La divulgación científica es como la música, requiere vocación para triunfar
El periodista español Pere Estupinyà participó de la apertura de la Hackatón de Divulgación Científica e Innovación.
El evento comenzó el lunes en Punta Arenas.
"La divulgación científica es como la música. Si no tienes vocación, no triunfarás", aseguró el periodista español Pere Estupinyà en la apertura de la Hackatón de Divulgación Científica e Innovación que comenzó este lunes en la ciudad chilena de Punta Arenas.
"A mí me escriben muchos jóvenes investigadores para contarme que les gustaría hacer divulgación. Entonces yo les pregunto si verdaderamente están dispuestos a trabajar gratis durante seis meses", relata este "consumidor omnívoro de ciencia" que presenta el programa "El cazador de cerebros", en el canal 2 de Televisión Española.
"La ciencia se está haciendo más transversal y nosotros, los comunicadores científicos, la estamos democratizando", considera por su parte la chilena Andrea Obaid, unas de la periodistas científicas más prestigiosas de Suramérica.
"La gente se está dando cuenta de que la ciencia y la tecnología están en todas partes, desde el secador de pelo hasta el celular", enfatiza Obaid, quien este miércoles presentará en Santiago un libro, una aplicación y un sitio web para mostrar rutas de turismo científico en Chile.
"El secreto para poner en marcha un proyecto de divulgación científica exitoso es destacar por algo. Hay gente que utiliza el humor y le funciona muy bien. Otros emplean las redes sociales de forma maravillosa. Cada uno tiene su estrategia", comenta Estupinyà, quien además de comunicador científico, es bioquímico, escritor y conferenciante.
Para Pere Estupinyà, quien empezó con un blog para el diario "El País" y acaba de publicar "El ladrón de cerebros", el secreto está en pensar más en el público que en los científicos, "porque lo que estos consideran importante no siempre coincide con lo que la gente piensa".
Según el autor de "La ciencia del sexo", hay un interés creciente de la sociedad por la investigación y la tecnología, pero existe una distancia entre la comunidad de investigadores y los ciudadanos.
"Esta brecha se está acortando a un ritmo que algunos querríamos que fuese más rápido, pero lo cierto es que la ciencia cada vez está más presente en la vida de las personas, porque la perciben como algo útil", dijo.
"Al fin y al cabo, se trata de una fuente de conocimiento que la gente necesita para tomar decisiones", sostiene el periodista catalán, a quien le gusta "contar historias que generen un interés en sí mismas".
El secreto del éxito en la divulgación científica, según Andrea Obaid, está en innovar y pensar en distintos públicos y plataformas.
"Por ejemplo, ahora los jóvenes consumen televisión desde el celular o desde YouTube. Entonces, tenemos que pensar en múltiples plataformas para divulgar la ciencia, ya sea una aplicación, un libro, un programa de radio o televisión, un blog, una revista o un concurso".
"La cuestión es entregar mensajes que le puedan interesar a cualquier persona, desde una ama de casa a alguien muy erudito", comenta la periodista chilena, quien ha encontrado en el turismo la clave para difundir ciencia.
"A todo el mundo le gusta viajar y contemplar paisajes bonitos, pero si además sabemos que ahí vivieron dinosaurios o hubo una erupción volcánica, la experiencia turística adquiere mayor valor", enfatiza Obaid, fundadora de Neurona Group y máster en Comunicación Científica, Médica y Medioambiental.