¿Por qué los hombres matan a las mujeres?
Un inédito proyecto de investigación español busca identificar los detonantes de cada crimen a objeto de predecirlos y prevenirlos.
Crea una "Escala del Riesgo Homicida" que determina las variables psicosociales más proclives a un resultado fatal.
Un elemento a considerar: el 45% de los femicidas españoles no tenía antecedentes de violencia.
"¿Por qué los hombres matan a las mujeres?". Ésta es la provocativa pregunta que intenta responder un inédito proyecto de investigación en España y que revisa, uno a uno, cientos de "homicidios de pareja".
El minucioso trabajo, de la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior español, se propuso estudiar pormenorizadamente, para fin de año, al menos 200 casos con victimarios ya condenados, ocurridos entre 2010 y 2016, y aplicar un método científico para averiguar qué detona cada crimen e, idealmente, predecirlos y prevenirlos a futuro, informó el diario El País.
Los 300 "revisores" -desde estudiantes de posgrado tutelados por catedráticos a psicólogos de la Policía Nacional y Guardia Civil- analizan la documentación sobre el homicidio en cuestión (policial, judicial, asistencial...), los entornos de víctima y agresor y concluyen en la cárcel entrevistando al asesino. Ya hay 42 casos cerrados y más de 100 en estudio, se indica.
El objetivo es lograr prevenir los crímenes detectando y sumando indicadores de la llamada "Escala del Riesgo Homicida" -que está siendo elaborada y mejorada a partir de las variables psicosociales halladas más comúnmente- en las comisarías y cuarteles donde se realizan las denuncias.
Pero, ¿cuáles son las variables psicosociales más comunes que servirán para mejorar la escala? En los hombres, factores como una "socialización en cultura sexista, aumento de discusiones, proceso de separación con o sin hijos, infidelidades (más si el despechado es él), escasa tolerancia a la frustración, sensación de abandono o de pérdida, estrés, rumiación de pensamiento...", consignó el medio.
Y en el caso de las mujeres: "Maltrato previo, baja autoestima, ser dependiente (emocional o económicamente), falta de apoyo social/familiar, situación de inmigración, adicciones...".
Primeros análisis: 20 por cierto son "sociópatas"
Los primeros análisis arrojaron que un 20 por ciento de los femicidas podrían considerarse "sociópatas", hombres con dificultades de integración social, con antecedentes penales o policiales; un 30 por ciento es inestable emocionalmente y un 5 por ciento podría clasificarse como psicópatas, detalla El País.
Además, frente a la idea generalizada de que la violencia de género implica una escalada (tensiones, agresiones verbales, físicas, falsa luna de miel y manipulación emocional...), existe un dato desconcertante: en el 45 por ciento de los casos los hombres que asesinaron a sus parejas no tenía ningún antecedente violento conocido.
Así, entrarían dentro de un amplio grupo que podría calificarse como agresores "ocasionales" y, por tanto, impredecibles, de acuerdo al diario hispano.
Pero aunque las revisiones de casos no terminarán hasta fin de año -y ahí recién estarán los resultados definitivos- ya hay una primera conclusión en la que coinciden los expertos: "No hay un patrón único, la violencia de género no se puede tratar como un fenómeno homogéneo, porque es heterogéneo y multicausal".
"Decir que todo es machismo es superficial"
"Decir que todo es machismo es quedarse en la superficie, hay que averiguar qué detona esa agresividad mortal", señalan los coordinadores del proyecto, el comandante de la Guardia Civil y doctor en psicología José Luis González y el policía y doctor en psicología Juan José López-Ossorio.
"Las explicaciones de cómo y por qué ocurrió el homicidio nos sitúan ante un fenómeno poliédrico", comentó López-Ossorio al diario. "Es probable que lleguemos a una clasificación de tipologías de agresores basada en esas diferentes explicaciones del crimen: desde uno con una demencia senil, hasta el que no tiene rastro de violencia", añadió.
"Desgraciadamente, hay que asumir que una persona normal puede hacer cosas que no son normales", agregó.
"Este proyecto no va a resolver el complejo problema de la violencia de género, pero va a ayudar a mejorarlo, y sólo un 10 por ciento de mejoría son seis mujeres muertas menos al año (en España)", concluyó Enrique Carbonell, director del Instituto Universitario de Criminología de la Universidad de Valencia, implicado en el proyecto.
Si en España (con más de dos veces la población de Chile) la media es de 60 muertes al año, en nuestro país se registraron 45 femicidios durante 2015 y 34 casos en 2016, y un 12 por ciento de las víctimas -es decir, cuatro de 34- realizó una denuncia previa en contra de su agresor, según cifras del Ministerio de la Mujer y Equidad de Género.