Sanciones erróneas pueden dejar al sistema público sin ejecutivos idóneos, según Landerretche
Al abordar la multa impuesta a su antecesor por el caso Inverlink, el vicepresidente ejecutivo de Corfo afirmó que a quienes ejercen ese cargo no les corresponde perseguir a "delincuentes".
Pese a enfatizar que no ha leído "ningún informe oficial" respecto de las sanciones que la Contraloría aplicó a Gonzalo Rivas, ex vicepresidente ejecutivo de la Corporación de Fomento a la Producción (Corfo), el ejecutivo que actualmente ocupa ese cargo, Oscar Landerretche, afirmó que "tenemos que tener cuidado respecto de la manera como establecemos las responsabilidades de la autoridades" ya que sanciones inadecuadas pueden dejar al sistema público sin personal idóneo.
En conversación con El Diario de Cooperativa, Landerretche afirmó que le parece "muy poco sustentable que se le adjudique una responsabilidad administrativa a un vicepresidente ejecutivo".
De esa manera se refirió a la multa de 500.000 pesos que la Contraloría aplicó a Rivas, por su responsabilidad administrativa en el robo de instrumentos financieros por 85 mil millones de pesos que afectó a la institución en febrero de 2003, hecho conocido como caso Inverlink.
Pese a enfatizar que las eventuales sanciones contra Rivas y otros siete empleados sólo las conoce por transcendidos de prensa, Landerretche consideró que "el vicepresidente ejecutivo tiene una responsabilidad directiva y política que no tiene nada que ver con estar supervisando cada una de las actividades que se realizan en Corfo".
Landerretche enfatizó que sanciones inadecuadas contra ejecutivos públicos pueden generar que las personas idóneas para esos cargos lo rechacen.
"Tenemos que tener cuidado respecto de la manera como establecemos las responsabilidades de la autoridades porque por el camino de establecer incorrectamente podemos llegar a que ninguna persona con compromiso con las políticas publicas o con el país esté dispuesta a ejercer un cargo público", señaló.
El vicepresidente de Corfo aseguró que, en su caso, sólo se siente responsable de generar las políticas adecuadas para una correcta gestión pero no de perseguir "delincuentes que se les ocurra hacer cualquier cosa".
"Me siento responsable sólo en la medida que tengo que establecer políticas, tengo que liderar el trabajo, tengo que conducirlo, tengo que establecer mecanismos de control, etcétera. No me considero responsable en términos que tenga que asegurar la invulnerabilidad total de la Corporación de Fomento después de cualquier conjunto de delincuentes que se les ocurra hacer cualquier cosa", afirmó.
"En lo personal soy una persona extremadamente rigurosa respecto de los trabajos que se me encargan y no creo que pueda asegurar que en todas las esquinas de todas la oficinas de Corfo a lo largo del país no ocurra algún evento como resultado de la acción de personas que se coluden para cometer actos delictuales", concluyó.