Diputado Jiménez anunció querella contra tres personas luego de su absolución

Jaime Jiménez, diputado por Melipilla y Peñaflor, afirmó que el fallo de la Corte de Apelaciones de Rancagua que lo absolvió de una condena por intento de cohecho sólo reafirma su inocencia de todas las acusaciones en su contra en el llamado caso coimas. A la vez, el legislador anunció que se querellará contra el empresario Alejandro Denham, quien lo acusó de intento de cohecho.

En conversación con El Diario De Cooperativa, el político –quien renunció a la Democracia Cristiana (DC) antes que se materializara su expulsión– aseguró que con su abogado, Luis Ortiz Quiroga, evalúa una querella contra Denham, pues "no es gratuito que alguien se pare en cualquier plaza pública, apunte con el dedo y haga cargos, y después de tirar la piedra, esconda la mano".

Asimismo, la acción legal incluirá a otras dos personas, quienes prestaron "falso testimonio" en su contra, sentenció Jiménez, quien aseguró que Denham "no es primera vez que hace este tipo de armados, para poder involucrar a alguien judicialmente".

El diputado explicó que, de acuerdo al expediente, el plantero Alejandro Denham reconoce que sólo relató hechos, pero no podía asegurar que los parlamentarios ahora absueltos hubieran cometido algún ilícito.

"No podrá pensar alguien que es regular que él diga: mire, aquí ha habido gente que me ha asegurado ganar las (licitaciones de plantas de) revisiones técnicas de todo el país, que es un absurdo por lo demás. Nosotros (los diputados) no tenemos facultades de designar plantas de revisión técnica", detalló.

Luego –añadió Jiménez–, cuando el magistrado le consulta cuánto dinero le pidieron los legisladores, Denham señala que no le han pedido "nada", y que no se acuerda de lo que supuestamente Pareto, Lagos y él le habrían exigido a cambio de esta presunta ayuda.

El parlamentario comentó que tras el fallo del jueves 5 de agosto siente una "serena tranquilidad", y en enfatizó que espera que el resto de los cargos en su contra "de la misma manera que se ha desvanecido esto, se desvanezcan, porque no hay una sola prueba que a mí me involucre en ilícito alguno".

Jaime Jiménez fue condenado, en el marco del llamado caso coimas, a 541 días de presidio y a la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos, por el delito de soborno.

Respecto a su relación con la DC, el parlamentario consideró que hay "situaciones que tendrán que verse en su minuto", pero subrayó que "el apellido se lleva en la sangre y el humanismo cristiano que uno profesa lo llevo desde niño, y por lo tanto son los valores con que uno ha sido formado y para eso no necesita un título".