Diputado Montes afirmó que su declaración contra Fernández no es una venganza
El parlamentario, quien fue detenido en dictadura, manifestó que si se ha comprobado que la tortura fue sistemática, es imposible que los civiles del régimen no supieran lo que estaba sucediendo.
El diputado del Partido Socialista (PS) Carlos Montes, quien declarará en favor del desafuero del actual senador y ex ministro del Interior de la dictadura, Sergio Fernández, señaló que entregar su versión a la Justicia no se trata de una venganza por haber sido torturado, ni "de armar enredos".
"Lo que se trata es poder saber donde están. Yo plantearía las cosas de otra manera, le diría a todos aquellos civiles que estuvieron que por qué no ayudan a recabar información y a saber qué pasó con los detenidos desaparecidos y donde están y en qué circunstancias desaparecieron", expresó en entrevista con El Diario de Cooperativa.
A su juicio, si se ha comprobado que la represión en la dictadura era sistemática, "como una forma de gobernar, de controlar a la ciudadanía, decir que (los civiles) no tienen nada que ver con los hechos, que no sabían nada, que eran blancas palomas sabemos que eso no guarda ninguna relación con la verdad".
En este sentido, Sergio Fernández, quien para Carlos Montes representa un "periodo bastante negro en el que sufrió mucha gente", no puede negar que tenía responsabilidad en el funcionamiento de los aparatos de seguridad, pues "era el ministro del Interior, vocero de todos los casos, que a través de él pasaba toda la información, seguramente el presupuesto".
"Lo importante seria tener actitudes más directas, más valientes, y más de hombrecito para saber que pasó con los detenidos desaparecidos. Esa es una responsabilidad de toda la sociedad chilena y de todos nosotros", enfatizó el legisllador, ironizando respecto al calificativo de Joaquín Lavín, quien dijo que Fernández fue muy "hombre" al receobocer su responsabilidad política en el período de represión.
Carlos Montes fue detenido en 1980 por los organismos represivos. En ese momento, se le entregó una carta que él mismo había enviado al miembro del Movimiento de Acción Popular Unitario (MAPU), Juan Maino, hecho que dio cuenta de que éste último también había sido detenido.
Al preguntar por Maino, se le informó que éste "se nos fue en el interrogatorio". Desde ese instante, Montes decidió declarar, como lo hizo ante Servando Jordán, el juez Juan Guzmán, y la Justicia italiana, y como ha manifestado, lo hará nuevamente.
Para el parlamentario, "todo indica que el tiempo no borra la historia, aquí el tiempo no es suficiente como algunos pensaron". En este sentido, es preciso que "las personas que tengan responsabilidades tengan que responder ante la Justicia, y yo creo que esto nunca acabará, va a seguir la presión mientras haya detenidos desaparecidos".