Tres militares fueron condenados por tráfico de armas a Croacia
El dictamen afecta a dos miembros activos de la FACh y el Ejército, que deberán cumplir cinco años de cárcel según la pena de primera instancia.
El juez militar general Miguel Trincado condenó a tres militares, uno en retiro y dos en servicio activo, por el caso de la venta de armas a Croacia en 1991, en medio de la vigencia de una prohibición de la ONU para terminar con la llamada "Guerra de los Balcanes".
El fallo de primera instancia condena a cinco años y un día al capitán de Ejército Pedro Araya y al oficial de la Fuerza Aérea de Chile (FACh) Patricio Pérez Villagrán por la exportación ilegal de material bélico.
En tanto, recibió una pena remitida de 541 días el sargento en retiro Ramón Pérez Orellana.
El fallo, que puede ser apelado por el Consejo de Defensa del Estado (CDE) o la defensa de los inculpados, ahora irá en consulta a Corte Marcial.
El contrabando de armas fue descubierto en diciembre de 1991, en Hungría, cuando la policía encontró un enorme cargamento bélico en el interior de cajas caratuladas como ayuda humanitaria del Hospital Militar de Chile destinadas a Sri Lanka.
Según las investigaciones judiciales, el cargamento estimado en 36 toneladas sería ingresado a Croacia por tierra desde Hungría.
En la época en que fueron descubiertas las armas existía un embargo de las Naciones Unidas que impedía vender a los estados de la ex Yugoslavia, que vivían en estado de guerra.
Entre los militares vinculados al tráfico de armas figuró el jefe del departamento de adquisiciones de la fábrica de armas del Ejército, coronel Gerardo Huber, que apareció muerto el 22 de febrero de 1992 en extrañas circunstancias, cuando debía declarar frente al juez que investigaba el contrabando.