Tribunal retiró dos cargos contra único oficial juzgado por abusos en Abu Ghraib
Con la decisión tomada por un magistrado militar, el coronel Steven Jordan ve rebajada a la mitad su posible condena por los hechos ocurridos en el centro de interrogatorios de la cárcel.
Un juez militar desechó dos cargos contra el teniente coronel Steven Jordan, el único oficial del Ejército de Estados Unidos juzgado por los abusos cometidos contra detenidos iraquíes en la prisión de Abu Ghraib.
Jordan, de 51 años, quien se declaró inocente de todos los cargos, todavía se enfrenta cuatro más en la corte marcial que inicia sus trabajos en Fort Meade, Maryland.
Si se le declara culpable podría recibir sentencias de más de ocho años, lo que representa una clara mejora dado que, si se hubieran mantenido todos los cargos, las sentencias podrían haber ascendido a más de 16 años.
Otros 11 soldados ya han sido condenados por crímenes cometidos en Abu Ghraib, y la sentencia más larga la recibió el ex cabo Charles Graner, condenado en enero de 2005 a 10 años de prisión por malos tratos, asalto, golpizas, actos indecentes y negligencia en el cumplimiento de sus deberes.
Los abusos cometidos en la prisión iraquí salieron a luz a principios de 2005 cuando se divulgaron en todo el mundo fotografías en las que se veía a los prisioneros atados, desnudos, hostigados por perros, o encapuchados, forzados a mantener posiciones por largos períodos.
Los cargos que se le imputan a Jordan se refieren a acontecimientos en el Centro de Interrogatorio de la prisión de Abu Ghraib, del cual él fue director, entre el 17 de septiembre de 2003 y el 19 de agosto de 2004, según indicó el Ejército.
Esta mañana el fiscal, teniente coronel John P. Tracy, anunció que el investigador, general George Fay, informó a la fiscalía que se había expresado "de manera errónea" cuando, en una audiencia previa al juicio, declaró que él le había avisado a Jordan de su derecho a permanecer callado en el curso de una entrevista en 2004.
En aquella entrevista Jordan dijo a Fay que jamás había visto que los detenidos fueran abusados y que tampoco los vio detenidos desnudos.
El juez, coronel de Ejército Stephen Henley, aceptó el pedido de la fiscalía para que se desecharan los dos cargos que se sustentaban en la declaración de Jordan durante la entrevista con Fay: el cargo de que hizo una declaración oficial falsa, que es punible con hasta cinco años de prisión, y el de obstrucción del proceso de la justicia, punible con hasta tres años.
Jordan se enfrentará al tribunal acusado de desobedecer la orden de Fay para que no hablara de la investigación con otras personas.
Los otros tres cargos pendientes se refieren al tratamiento de los detenidos: a Jordan se le acusa porque no cumplió con una reglamentación, se le acusa de crueldad y mal trato de detenidos, y de negligencia en el cumplimiento de sus deberes.
El capitán Samuel Spitzberg, quien encabeza el equipo de defensores de Jordan, sostiene que aunque Jordan era el director del centro de interrogatorios, él pasó la mayor parte de su tiempo tratando de mejorar las pésimas condiciones en que vivían los soldados en Abu Ghraib.
Asimismo, los defensores sostienen que las condiciones condenables en los interrogatorios las promovieron otros dos oficiales: el coronel Thomas Pappas, comandante de brigada que era el oficial de rango más alto en Abu Ghraib, y la coronel Carolyn Wood, que comandaba una unidad de interrogadores en el centro de detención.
Pero ni Pappas ni Wood han sido acusados por crímenes, aunque a Papas el Ejército lo amonestó y le impuso una multa porque una vez aprobó el uso de perros durante un interrogatorio sin pedirle permiso a sus superiores.
"El Ejército de Estados Unidos tiene el compromiso de asegurar que todos los soldados se comporten de acuerdo con los valores del Ejército y las leyes de guerra sean cuales sean las circunstancias y el contexto", afirmó un comunicado militar.
"El Ejército toma muy en serio las acusaciones de abuso de prisioneros y continuará ateniéndose a los procedimientos y las normas de forma que rindan cuentas quienes hayan violado el código de conducta militar", agregó.
El mes pasado en una entrevista con el diario The Washington Post, Jordan, quien fue director del centro de interrogatorios en la prisión, rechazó las acusaciones y dijo: "No soy culpable de nada que tenga que ver con Abu Ghraib, y estoy harto de todo ello".
El teniente coronel Jordan no aparece en ninguna de las fotografías en las que se muestra el abuso de prisioneros, pero se le acusa de haber aprobado el uso, ilegal, de perros y nudismo durante los interrogatorios para amedrentar y humillar a los detenidos.
El tribunal militar que juzgará a Jordan lo forman por lo menos cinco oficiales de rango mayor que el teniente coronel, y podría durar unas dos semanas. (EFE)