Batasuna dijo que detención de su mesa es una "declaración de guerra"
El portavoz de la organización independentista vasca sostuvo que el gobierno español se vale de una estrategia belicista para "perpetuar el conflicto político".
Batasuna, el brazo político ilegalizado de la organización armada ETA, cree que la detención de 23 de sus miembros es "una declaración de guerra en toda regla" del Gobierno español "al movimiento independentista vasco".
Así lo expresó este sábado el portavoz de Batasuna, Pernando Barrena, quien afirmó: "Seguiremos luchando por la independencia y el socialismo, y por encima de toda represión, no daremos un paso atrás en la defensa de los derechos de este pueblo".
La reacción de Batasuna es una respuesta a la detención, en la noche del pasado jueves y en la madrugada del viernes, de 23 miembros de la dirección de Batasuna en Guipúzcoa (País Vasco, norte) por orden del juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón.
Este magistrado investiga la subordinación de Batasuna a ETA y la financiación de la banda terrorista con las llamadas "Erico Tabernas", bares en los que se reúnen los independentistas vascos.
Entre los detenidos, figuran los dirigentes de Batasuna Josefa Permach, Rufi Etxebarría y Juan José Petrikorena.
Según Barrena, la operación judicial contra Batasuna fue "ordenada" por el ejecutivo de Madrid con el fin de "cerrar las puertas a la independencia de este pueblo" y "perpetuar el conflicto político".
Pernando Barrena consideró que "la única oferta" que hace el Gobierno central al pueblo vasco es "tan directa como cruda: Constitución Española y represión", y para ello "se vale de una estrategia de guerra".
En Madrid, los 23 miembros de la dirección de Batasuna detenidos permanecen en las dependencias de la Comisaría General de Información en Madrid, a la espera de pasar el domingo a disposición del juez Garzón, indicaron fuentes policiales.
El juez les acusa de reiteración delictiva por haber vulnerado la suspensión de actividades de Batasuna, que él mismo decretó, ya que la detención se produjo cuando al parecer mantenían una reunión para renovar la estructura del partido.
En marzo de 2003, el Tribunal Supremo suspendió las actividades de Batasuna al considerar que esa formación y sus predecesoras -Herri Batasuna (HB) y Euskal Herritarrok (EH)- tenían una "identidad sustancial" con ETA.
El portavoz de Batasuna en Francia, Xabi Larralde, ha negado que el objetivo de esa reunión fuera introducir cambios en la Mesa Nacional, sino que se trataba de uno de los encuentros habituales que mantiene la organización.
También este viernes, el juez Garzón ordenó el ingreso en prisión incondicional de Joseba Álvarez y Oihana Aguirre, portavoces de las organizaciones del entorno de ETA Batasuna y de Askatasuna, respectivamente, detenidos el pasado martes en la ciudad de San Sebastián (País Vasco).
Ambos fueron encarcelados por un delito de pertenencia a ETA; Álvarez, acusado de reincidir en el delito por el que ya estaba procesado en otro sumario, y Aguirre de integración en banda terrorista por haber participado en ruedas de prensa en nombre de Askatasuna. (EFE)