Rodríguez Zapatero se reunió con Ibarretxe y le dijo que no habrá consulta
El presidente regional vasco mantuvo su decisión de llamar a un referendo no vinculante para octubre de 2008, pese a la negativa del Ejecutivo español.
El jefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, comunicó este martes al presidente regional vasco (lehendakari), Juan José Ibarretxe, que no podrá llevar a cabo su iniciativa de convocar un referendo sobre el futuro del País Vasco.
Tras una reunión en el Palacio de la Moncloa, las posiciones parecen no haber cambiado por ambas partes, ya que Ibarretxe sostuvo que sigue adelante con sus planes.
El lehendakari fue recibido por el presidente del Gobierno después de que a finales de septiembre provocara una gran tormenta política con su anuncio de que proyecta celebrar una consulta popular dentro de un año, el 25 de octubre de 2008, sobre el futuro del País Vasco.
Ibarretxe explicó este martes que esa primera consulta, no vinculante y cuya celebración pretende "pactar" con el Ejecutivo español, sería para "abrir el camino" de un proceso de autodeterminación que desembocaría en un referendo, jurídicamente vinculante, en 2010.
Según Rodríguez Zapatero , "debe estar claro como el agua" que Ibarretxe no puede convocar una consulta, por lo que "lo que no se puede hacer, no se va a hacer, no se hará".
"Las llamadas consultas populares, por vía de referendo que contempla nuestro ordenamiento jurídico, siempre tienen que ser autorizadas por el Estado, a través del Gobierno, así es en el ámbito local y en todos los supuestos, independientemente de la vinculación o el valor jurídico que tengan", señaló Zapatero.
Pero, el lehendakari defendió su propuesta que dijo "es legítima, legal y democrática", y recurrió a unas palabras del presidente de Israel Simón Peres para dar por su parte por iniciado un proceso de negociación al señalar que todas las negociaciones comienzan con un encuentro "titubeante".
Trazó además un paralelismo con las negociaciones del gobierno británico para el fin de la violencia y el desarme de IRA en Irlanda del Norte, al señalar que acudió a Madrid para ofrecer al Gobierno un "acuerdo de Downing Street a la vasca".
En este contexto, afirmó que no espera un "desplante", porque -dijo- sería "difícil de entender que, si se ha estado hablando con Batasuna (organización vasca independentista ilegalizada) y ETA sobre el País Vasco, ahora se niegue ese diálogo con el lehendakari".
El presidente regional aludía al fracasado intento de establecer un proceso de diálogo por parte del Gobierno de Rodríguez Zapatero para acabar con el terrorismo de ETA.
Este martes, además, el líder del Partido Popular (PP), Mariano Rajoy, volvió a rechazar frontalmente los planes de Ibarretxe y afirmó que "España no se puede negociar".
"España es lo que digan los españoles", afirmó Rajoy, que dijo que le resultó "sorprendente" que el lehendakari haya "utilizado como argumento" que hay que negociar con él puesto que también se había negociado hace meses con ETA.
"Ni ETA ni Batasuna tenían ningún derecho a negociar políticamente sobre España", señaló el dirigente conservador, que opinó que tampoco tiene "ningún derecho" a hacerlo el presidente regional vasco, porque "España es de los españoles y será lo que digan todos los españoles". (EFE)