Uribe dijo que los mexicanos muertos en ataque a campamento FARC eran terroristas
El presidente colombiano dijo que los cuatro estudiantes fallecidos en territorio ecuatoriano eran culpables del delito de "concierto agravado para delinquir".
El presidente colombiano, Álvaro Uribe, afirmó este miércoles que los cuatro estudiantes mexicanos que murieron en un campamento de la guerrilla de las FARC en Ecuador, bombardeado por tropas colombianas el pasado 1 de marzo, eran todos "terroristas".
"En mi concepto eran terroristas", afirmó Uribe, quien participa junto a otros seis mandatarios latinoamericanos en el III Foro para América Latina y el Caribe del Foro Económico Mundial, que concluye este miércoles en la ciudad mexicana de Cancún.
El gobernante colombiano reiteró que las cuatro víctimas mortales y la también mexicana Lucía Morett, una de las tres sobrevivientes de la incursión, "estaban en un campamento terrorista" de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y eran
"cómplices" del grupo armado.
Manifestó que un video que entregaron las propias autoridades ecuatorianas "muestra a los estudiantes mexicanos en una gran familiaridad con las FARC, propia de la complicidad, propia de quien sí hacía parte del grupo".
A su juicio, esos mexicanos son culpables del delito "concierto agravado para delinquir".
Uribe sostuvo que los estudiantes "no estaban ahí (en el campamento) en una actividad humanitaria autorizada ni eran rehenes de las FARC".
En este sentido, rechazó, como defiende la propia Morett y los familiares de los muertos, que estuvieran en el campamento para hacer una investigación académica sobre movimientos armados.
Opinó que esa opción "no la puede admitir el mundo democrático", porque "hay demasiada literatura e internet" sobre el tema y "no es responsable ni serio irse a un campamento a familiarizarse con terroristas".
El mandatario colombiano defendió que los actos terroristas de las FARC "son notorios" y recordó que asesinan, secuestran, utilizan minas antipersonales, ponen bombas y son el "principal proveedor de narcotráfico del mundo".
Uribe indicó que su colega mexicano, Felipe Calderón, con quien sostuvo ayer una reunión bilateral, "siempre se ha mostrado muy dolido por la muerte de estudiantes mexicanos en ese campamento".
"Él (Calderón) ha reclamado y ha pedido que el Gobierno colombiano colabore con una investigación que se quiere llevar hasta el último detalle", dijo.
"A nosotros nos duele cualquier muerte (...), pero bombardeamos por cumplir el deber de defender a nuestros ciudadanos", explicó.
A las afueras del hotel en el que se celebra el Foro Económico Mundial (FEM), Marcelo Franco, padre de Fernando Franco Delgado, uno de los mexicanos muertos en el bombardeo del campamento de las FARC, se manifestó este miércoles por la suerte de su hijo y calificó a Uribe de "terrorista".
Cuestionado sobre los recientes cruces de acusaciones entre Colombia y Ecuador, que han escalado la tensión de nuevo entre estos dos países, Uribe manifestó que lo único que busca su Gobierno es que se cumplan los compromisos contraídos en el seno de la
Organización de Estados Americanos (OEA).
Esto significa que los países "no los alberguen (a las FARC) y que nosotros no tengamos que emprender acciones militares contra estos terroristas en otros territorios", precisó. (EFE)