La lluvia en Beijing también complicó a la reina del salto alto
La croata Blanka Vlasic, gran favorita, avanzó a la final con algunos problemas.
Su principal rival, la rusa Elena Slesarenko, tuvo aún más dificultades.
La lluvia que cayó fuertemente sobre Beijing complicó a varios competidores este jueves en el atletismo olímpico, incluida la reina del salto alto, la croata Blanka Vlasic, gran candidata a la medalla de oro y conocida por sus bailes cada vez que logra un triunfo.
Vlasic, campeona mundial al aire libre y en pista cubierta y una de las pocas que supera con solvencia los dos metros, no estuvo cómoda en la ronda clasificatoria, que primero se aplazó durante una hora por el diluvio y luego se disputó en condiciones muy difíciles.
Incluso, en contra de lo que es habitual en la balcánica, cometió un nulo sobre 1,93 metro, altura que rebasó al segundo intento y que significó su clasificación junto a otras 14 atletas.
Favorita con mesura
Se lo toma con calma Vlasic, pese a su inmenso favoritismo. "En el deporte no hay nada seguro", advirtió. Eso, aunque su principal rival, la rusa Elena Slesarenko, tuvo aún más problemas y sólo superó el 1,93 metro en el tercer salto.
"En estas circunstancias es normal que las cosas no sean fáciles, pero no es preocupante", comentó Vlasic, quien explicó que es complicado ajustar bien la carrera y que además se equivocó en elegir el lugar para dejar todo su equipo, que acabó empapado.
"Pero está hecho, que es lo más importante", señaló la balcánica, quien agregó que está "en buena forma" y que no le afectará la presión por ser la favorita tras la regularidad mostrada en sus marcas. Su tope lo fijó en 2007 en Estocolmo con 2,07 metros, mientras que el récord mundial está en 2,09 desde 1987 en manos de la búlgara Stefka Kostadinova.
Otras amenazas
Atletas como la española Ruth Beitia o la alemana Ariane Friedrich, agradecieron la lluvia y pasaron el 1,93 en el primer intento. La germana afirmó: "No es un problema para mí. Me siento bien cuando llueve, porque en abril estuve entrenando en Singapur y allí siempre llovía. Volví a Alemania y también llovió el 40 por ciento de los días. Estoy acostumbrada al agua, no me preocupa".
Aseguró que Vlasic "es buena", pero que ella también lo es y que en la final luchará por conseguir una medalla porque cree que está capacitada para hacerlo.