Opositores aceptaron ahora reunirse con gobierno de Evo Morales
Los prefectos habían suspendido el diálogo a mediados de semana.
Autonomistas piden reunión formal con los delegados de Unasur.
Los opositores autonomistas de Bolivia aceptaron este viernes reunirse con el presidente Evo Morales el próximo domingo para discutir el futuro del diálogo sobre la crisis política nacional, que quedó en suspenso hace dos días.
El prefecto (gobernador) de Tarija, Mario Cossío, portavoz de sus colegas de Santa Cruz, Beni y Chuquisaca, confirmó la asistencia de todos al diálogo tras reunirse con las delegaciones internacionales que intentan mediar en el conflicto, salvo con los de Unasur, que no asistieron al encuentro.
"Los prefectos nunca renunciaremos al diálogo y, pese a los nuevos apresamientos del día de ayer (jueves), vamos a concurrir el domingo a la reunión con el presidente para discutir el futuro" de este proceso, dijo Cossío en una rueda de prensa en Cochabamba.
"Vamos a estar, como una más de nuestras señales de voluntad, presentes y los equipos técnicos, sin participar, permanecerán de todas maneras en Cochabamba a la espera de saber qué es lo que va a ocurrir con el diálogo", agregó el gobernador tarijeño.
La decisión de participar en la reunión del domingo se produce después de que el Gobierno confirmó la noche del jueves que Morales asistiría a la mesa de negociaciones.
Desde hace 15 días y con escasos avances, Gobierno y opositores tratan de llegar a acuerdos sobre el referendo para validar el proyecto de Carta Magna impulsado por Morales, las autonomías que demandan los prefectos y el reparto de los ingresos petroleros al Estado y las regiones.
Dos de los prefectos opositores. |
Reclamos contra el gobierno y Unasur
Pero a mediados de esta semana los gobernadores dieron por suspendidas las negociaciones ante lo que consideran un clima de "persecución" contra los líderes y activistas de la causa autonomista, a los que el Ejecutivo acusa de terroristas por haber participado en atentados contra gasoductos, entre otros.
Cossío reclamó este viernes que el Estado cumpla con la ley pero en todos los casos y no sólo contra la oposición.
Recordó que el Gobierno no ha actuado contra los campesinos que cercaron con armas la ciudad de Santa Cruz el mes pasado o contra los dirigentes afines a Morales que amenazan hacer lo mismo contra el Congreso.
También dijo que el Ejecutivo no respeta los acuerdos preliminares del diálogo, en particular el que plantea discutir posibles cambios al proyecto de nueva Constitución, que Morales acepta revisar sólo en lo referido a las autonomías.
Cossío además informó de que se reunió este viernes "con los testigos del proceso de diálogo" a una cita a la que asistieron delegados de Naciones Unidas, la Unión Europea, la Organización de Estados Americanos (OEA) y las iglesias católica, y evangélicas.
En cambio, en esta cita no participaron representantes de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) que, según Cossío, plantearon un encuentro "informal" que los prefectos no aceptan.
El dirigente tarijeño indicó que si los delegados de Unasur quieren reunirse con los prefectos deben hacerlo de modo transparente. "Estamos aquí, no hay nada que ocultarle a Bolivia", dijo Cossío.