Unión Europea condenó detención de empleados británicos en Irán
Cancilleres tildaron de "inaceptable" esa "forma de intimidación y acoso".
Régimen de Teherán acusa a funcionarios diplomáticos de instigar disturbios.
La Unión Europea (UE) condenó la detención de ocho empleados de la embajada británica en Teherán que fueron acusados de estar involucrados en las protestas y disturbios registrados tras las últimas elecciones en Irán, pidiendo el cese del acoso al personal diplomático europeo en la República Islámica.
Los arrestos son una "forma inaceptable de intimidación y acoso", dijo el ministro británico de Relaciones Exteriores, David Miliband, en una reunión informal de ministros de la UE en la isla griega de Corfú.
Miliband deploró la detención de los empleados de la legación británica en Teherán, siendo cuatro de ellos liberados este domingo.
Al cabo de la reunión informal, el canciller español, Miguel Angel Moratinos, instó a las autoridades iraníes a que "no permitan este acoso y amenazas a personal de la Unión Europea en las embajadas europeas en Irán".
A dos semanas de los comicios, persisten las protestas contra la "irregular" reelección de Ahmadineyad. (Foto: EFE) |
Inteligencia iraní defendió detenciones
Tras anunciar la liberación de cuatro de los retenidos, el ministro de Inteligencia iraní, Gholam Husein Mohseni Ejei, aseguró que los empleados fueron enviados por la propia legación británica a las marchas para "recopilar información e inculcar ciertas ideas a los manifestantes y a la sociedad".
"La embajada británica desempeñó un papel crucial en los recientes disturbios a través de los medios de comunicación pero también de su plantilla", afirmó el ministro, a quien cita la agencia de noticias estatal Irna.
"Tenemos fotos y videos de ciertos empleados de la embajada británica en las manifestaciones", agregó Ejaei.
Al menos 20 personas han muerto -según cifras oficiales- y centenares han sido arrestadas o están en paradero desconocido a raíz de la represión que el régimen iraní ha emprendido contra las protestas que generó la reelección del presidente Mahmud Ahmadineyad, el 12 de este mes, en elecciones que sus opositores califican de irregulares.