Hillary Clinton anunció su rechazo a reelección de Insulza en la OEA, según diario
La molestia de EE.UU. viene de las gestiones del ex canciller para integrar a Cuba al organismo.
Además, de acuerdo a El Mercurio, se critica el manejo que ha hecho el diplomático en la crisis de Honduras.
La secretaria de Estado de EE.UU, Hillary Clinton, informó al Gobierno chileno que no apoyará la reelección de José Miguel Insulza como secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Según el diario El Mercurio, la razón de la potencia mundial para no apoyar la candidatura del chileno se basaría en las gestiones que ha hecho el ex ministro para reincorporar a Cuba al organismo, situación que causó pleno rechazo, ya que el "panzer" no ponía exigencias a la isla de por medio, mientras que Estados Unidos intentó levantar sanciones.
El tres de junio, la OEA derogó la resolución de 1962 que suspendió a Cuba del organismo internacional, aunque instó al país caribeño a aceptar la carta democrática del grupo, que exige promover la democracia y los derechos humanos, antes de un eventual reingreso.
Pero las molestias no sólo se reducen a Cuba, ya que según el rotativo, Insulza también ha sido criticado por viajar a Honduras tras el Golpe de Estado para intentar mediar en la crisis, gestión que habría sido desprestigiada por Estados Unidos, luego de lo cual Clinton nombró como único negociador al presidente de Costa Rica, Oscar Arias.
De esta manera, Clinton se habría comunicado dos veces con Michelle Bachelet para informarle su rechazo.
Cercanía con Chávez
Para el sector centro y conservador de la política estadounidense, Insulza tiene una supuesta "peligrosa" cercanía con el presidente venezolano Hugo Chávez, y se ha equivocado al no sentenciar con la misma energía con que ha criticado la crisis hondureña, las prácticas "antidemocráticas" que han sucedido en el gobierno venezolano.
Además, la oposición venezolana le objeta su nulo pronunciamiento en el eventual fraude de las elecciones municipales de Nicaragua, en el decapitamiento del Tribunal Constitucional en el gobierno de Evo Morales y la expulsión de 55 congresistas en Ecuador por oponerse a la Asamblea Constituyente de Rafael Correa.