Ahmadineyad aseguró que Irán está dispuesto a contribuir a la paz en el mundo
"Hoy anunciamos el compromiso de participar en el proceso de construcción de una paz duradera", dijo.
Delegaciones de Estados Unidos y otras naciones occidentales abandonaron la sala cuando tomó la palabra el mandatario.
El presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, aseguró este miércoles ante la Asamblea General de la ONU que su país está dispuesto a participar en la construcción de una "paz y seguridad duraderas" en el mundo y a "estrechar las manos honestas".
Así, el mandatario defendió el programa nuclear de Irán, puesto de nuevo en entredicho por Estados Unidos, Rusia, Francia, Reino Unido y China, más Alemania, al tiempo que subrayaba que tiene "uno de los Gobiernos más progresistas y democráticos del mundo", en respuesta a las críticas por el pasado proceso electoral de su país.
La delegación estadounidense ante la ONU, al igual que las de otros de países occidentales, abandonaron el pleno de la Asamblea General cuando el presidente iraní tomó la palabra.
"Hoy anunciamos el compromiso de participar en el proceso de construcción de una paz duradera y la seguridad mundial para todas las naciones basada en la justicia, la espiritualidad y la dignidad humana, al tiempo que defendemos nuestros derechos legítimos", aseguró el mandatario.
Un mesurado Ahmadineyad
Menos combativo que en anteriores intervenciones ante la ONU, Ahmadineyad aseguró que su país, tras "30 años de afrontar actitudes hostiles", desea crear "un mundo en el que prevalezca la justicia y la compasión".
"Para alcanzar esas metas, nuestra nación está preparada a estrechar calurosamente las manos honestas que se nos extiendan", dijo el mandatario, en una aparente referencia a la disposición del presidente de Estados Unidos , Barack Obama, de dialogar con Teherán.
Aseguró que ningún país "puede asegurar que no necesita reformarse y cambiar en el camino hacia la perfección", aunque resaltó que la República Islámica tiene "uno de los Gobiernos más progresistas y democráticos del mundo".
Ahmadineyad hizo una referencia en su discurso a su reciente y polémica reelección, al asegurar que Irán "ha llevado a cabo con éxito una elección gloriosa y completamente democrática que abre un nuevo capítulo".
Contra Israel y Estados Unidos
Pese a rebajar el tono de anteriores intervenciones, Ahmadineyad arremetió en varias ocasiones contra Estados Unidos y, particularmente contra Israel, al que de nuevo se refirió como "el régimen sionista".
"Ya no es aceptable de que una pequeña minoría domine la política, la economía y la cultura de grandes partes del mundo mediante complicadas redes, y establezca una nueva forma de esclavitud, dañando la reputación de otras naciones, como las europeas y Estados Unidos, para lograr sus ambiciones racistas", señaló.
También acusó al Gobierno israelí de llevar a cabo "un genocidio" contra las poblaciones palestinas en los territorios ocupados, de los que fueron "expulsados" hace 60 años mediante la fuerza y la coerción.
"¿Cómo es que los crímenes de los ocupadores contra mujeres y niños indefensos y la destrucción de viviendas, granjas, hospitales y escuelas puede recibir el respaldo incondicional de ciertos gobiernos?", se preguntó.
Poco antes de que el presidente iraní interviniese ante este foro internacional, cientos de personas se congregaron en el exterior de la ONU con banderas iraníes y las caras pintadas de verde para pedir libertad y democracia en ese país.
Los manifestantes portaban igualmente pancartas de rechazo al régimen iraní y pedían al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, que abriese una investigación sobre el proceso electoral iraní, que calificaron de fraudulento.