Piñera comprometió 60.000 trabajos adicionales por el terremoto
Presidente cifró en "más de 400" las víctimas fatales del sismo y tsunami.
En La Moneda, reafirmó que las pérdidas suponen el 17 por ciento del PIB.
El Presidente Sebastián Piñera se dirigió por primera vez al país en cadena nacional, en la que realizó un análisis de las pérdidas dejadas por el terremoto y maremoto que afectó al país el pasado 27 de febrero.
En cuanto a las víctimas fatales, las cifró en "más de 400"; y las materiales en cerca del 17 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), es decir cerca de 30.000 millones de dólares.
Sobre las medidas que contempla el plan de reconstrucción que llevará a cabo su Gobierno se encuentra "volver a poner en marcha el aparato productivo y proteger y crear 60 mil oportunidades adicionales de empleo, especialmente en las regiones afectadas".
"Y sabemos que para enfrentar con éxito este desafío, desde la misma madrugada del día de la tragedia, y desde hace una semana como Presidente de Chile, hemos realizado un profundo y amplio diagnóstico de la tragedia y de sus consecuencias. Hemos elaborado un ambicioso y sólido plan de trabajo para que seamos capaces de enfrentar esta crisis y de iniciar pronto la reconstrucción", agregó.
Además, reafirmó el compromiso de que todos los estudiantes, en especial los de las regiones de Biobío y Maule, cumplirán a cabalidad con el año escolar y entrarán a clases en un periodo máximo de 40 días.
"El desafío de levantar Chile va mucho más allá que levantar lo que destruyó el terremoto (...) sino elaborar un sólido plan de acción para enfrentar los efectos de la catástrofe", apuntó.
Balance de las pérdidas
En su primera cadena nacional, marcada por una breve introducción con una versión más marcial del himno nacional, a diferencia de la usada durante el Ggbierno de Michelle Bachelet, el Mandatario hizo un balance de los daños generados por la catástrofe.
"Hubo graves y costosas pérdidas materiales. Más de 200 mil viviendas destruidas o gravemente dañadas; 2.750 escuelas inhabilitadas, y casi un millón de niñas y niños de nuestro país que no han podido iniciar normalmente su año escolar; 35 hospitales inutilizables o severamente dañados", señaló.
"Adicionalmente, nuestros edificios públicos, nuestro patrimonio cultural, así como nuestras carreteras y caminos, puertos y aeropuertos, nuestras iglesias, estadios, obras de regadío, redes de transmisión eléctrica y de telecomunicaciones, y también las instalaciones y equipamiento de nuestras Fuerzas Armadas, empresas públicas y privadas, fueron también gravemente afectadas por esta tragedia", apuntó.
Las últimas palabras de su alocución estuvieron centradas en un llamado a la unidad, precisando que "son tiempos de generosidad y no de egoísmos, de fraternidad y no de odiosidad. Y por sobre todo, son tiempos de fortalezas y no debilidades".