El Vaticano declaró culpable a Karadima
Lo condenó a una vida de retiro y oración.
Decisión eclesiástica fue dada a conocer por el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati.
El caso, en la justicia civil, permanece cerrado.
El Vaticano, a través de Congregación para la Doctrina de la Fe, declaró culpable por el delito de abuso de menores al sacerdote chileno Fernando Karadima, en comunicado dado a conocer este viernes por el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati.
"Sobre la base de las pruebas adquiridas, el reverendo Fernando Karadima Fariña es declarado culpable de los delitos mencionados en precedencia, y en modo particular, del delito de abuso de menor en contra de más víctimas", señaló el arzobispo de Santiago en lectura del informe enviado por el Vaticano.
"En consideración de la edad y del estado de salud de Karadima Fariña, se considera oportuno imponer al inculpado de retirarse a una vida de oración y de penitencia, también en reparación de las víctimas de sus abusos", agregó Ezzati.
"Se impone también la pena expiatoria de prohibición perpetua del ejercicio público de cualquier acto de ministerio, en particular de la confesión y de la dirección espiritual de toda categoría de personas, además, se impone la prohibición de asumir cualquier encargo en la Unión Sacerdotal del Sagrado Corazón", añade el documento.
En caso de no observar las medidas indicadas, el inculpado podrá recibir penas más graves, no excluida la dimisión del estado clerical.
Ezzati reconoció un profundo dolor
Tras leer el fallo, Ezzati contó que dio cuenta del fallo a Karadima el 17 de enero, quien se mostró sorprendido por la decisión.
Además, el líder de la Iglesia Católica chilena contó que vive "una profunda pena y dolor por las personas dañadas, a quienes una vez más quiero manifestar mi cercanía de padre y pastor. Hoy personalmente quise ponerme en contacto con las víctimas para darles a conocer la resolución de la Santa Sede, mientras a pocos días de iniciado el Ministerio en la Arquidiócesis tuve la oportunidad de reunirme con uno de ellos".
"Asimismo, siento gran tristeza por el daño que se ha causado al ministerio y a la misión propia del sacerdote en la Iglesia. Sin embargo, también me asiste una serena esperanza porque, como dice Jesús, la verdad los hará libres. Creo que nunca debemos renunciar a la búsqueda de esa verdad", añadió en conferencia de prensa.
Mientras el juicio eclesiástico contra Karadima muestra avances, la justicia ordinaria sobreseyó al párroco en el proceso cerrado por el juez Leonardo Valdivieso.
Sin embargo, el 11 de febrero pasado la fiscal de la Corte de Apelaciones de Santiago, María Loreto Gutiérrez, propuso reabrir la investigación en contra del sacerdote, lo cual fue visto como algo "esperanzador" por los denunciantes.
Tras reunirse con Karadima, el arzobispo de Santiago dijo que "la reacción del padre fue de mucha sorpresa y de meditación muy profunda, él emprendió la tarea de preparar su defensa frente a la Santa Sede".
"El se considera inocente y la iglesia juzga hechos externos, de internis not judicat eclesai, no tiene derecho a juzgar la conciencia de las personas", agregó la autoridad eclesiástica.