Popularidad de Obama subió 11 puntos tras anunciar la muerte de Bin Laden
Así lo asegura una encuesta difundida por New York Times y CBS.
El alza es incluso superior a la de Bush tras la captura de Sadam Husein.
El respaldo de los estadounidenses a su presidente, Barack Obama, aumentó en 11 puntos tras su anuncio de la muerte de Osama bin Laden, de forma que ahora la mayoría de sus conciudadanos aprueban su trabajo al frente del Gobierno, su política exterior y su gestión en Afganistán.
Así lo aseguran los resultados de una encuesta difundida por el diario The New York Times y la cadena CBS, que ha sido elaborada ya con más calma que los primeros sondeos realizados desde que el domingo se conociera la muerte de Bin Laden a manos de tropas estadounidenses en territorio paquistaní.
Según esta encuesta, en la actualidad el 57 por ciento de los estadounidenses aprueba la gestión de Obama al frente del Gobierno, mientras que hace tan sólo un mes ese porcentaje era del 46 por ciento, lo que significa que ya más de la mitad de los estadounidenses apoya al ocupante de la Casa Blanca.
Este incremento de 11 puntos porcentuales es incluso superior al que logró el ex presidente George W. Bush cuando anunció la captura de Sadam Husein en diciembre de 2003, una noticia que le otorgó 8 puntos más en el porcentaje de aprobación popular.
La economía, al debe
Por tendencias políticas, entre los republicanos el apoyo a Obama dio un salto de 15 puntos, hasta el 24 por ciento, y entre los independientes de 11 puntos (llegando a 52 por ciento), mientras que entre los demócratas el avance ha sido de 7 puntos (elevándose al 86).
Esta euforia no oculta sin embargo que los estadounidenses siguen temiendo al terrorismo internacional y, de hecho, seis de cada diez ciudadanos considera que la muerte de Bin Laden eleva el nivel de amenaza terrorista sobre Estados Unidos a corto plazo y tan sólo el 16 por ciento dice sentirse ahora más seguro.
Además, la muerte de Bin Laden tampoco ha modificado la percepción de los estadounidenses sobre la gestión de su presidente en materia de política económica, que sólo aprueba cerca de la mitad, los mismos que hace un mes.