Los últimos recursos para intentar frenar el proyecto HidroAysén
Tras la aprobación, sólo restan impugnaciones ante el Ministerio de Medio Ambiente o recursos en tribunales.
"Esto se judicializará bastante", recalcó a Cooperativa.cl Marcelo Mena, director del Centro de Sustentabilidad de la UNAB.
Pocas son las instancias a las que pueden apelar los opositores de HidroAysén tras la aprobación del megaproyecto por 11 votos a favor y una abstención en la Comisión de Evaluación Ambiental.
"Se puede impugnar el resultado hacia el Ministerio de Medio Ambiente si existe alguna institución o persona cree que no fueron consideradas sus observaciones. Pero eso no llegará a nada", resumió a Cooperativa.cl el director del Centro de Sustentabilidad de la Universidad Andrés Bello (UNAB), Marcelo Mena.
De acuerdo a Mena, la mayor oposición al proyecto estará en tribunales, recalcando que "esto se judicializará bastante con recursos de otro tipo".
El experto calificó que "paradójico" que "un proyecto haya pasado de ser tan cuestionado, de más de 2.000 observaciones, a casi ninguna", indicando que "la Comisión de Evaluación Ambiental o hizo vista gorda o fue ordenada desde lo alto a aprobar".
Lo que viene
Para el ingeniero ambiental, La Moneda se verá afectada con el correr de los días tras la aprobación del proyecto, indicando que "el rechazo de la ciudadanía es muy potente y visceral. Le costará popularidad al Presidente Piñera y con el tiempo le pesará".
"Esto recién comienza. Será la madre de todas las batallas. Ojalá que sea una batalla de ideas, sin violencia", afirmó.
Tras la aprobación de este lunes, la empresa introduciría a fines de año el estudio de impacto ambiental para la línea de transmisión que llevará la energía desde la Patagonia hasta la zona central, que ya ha motivado críticas entre políticos y los mismos propietarios de las tierras.
Para 2014, los accionistas evaluarán la viabilidad comercial del proyecto, para determinar finalmente si es necesario levantar recursos para financiar la construcción e iniciar los trabajos de construcción de las cinco centrales.
Si las obras se inician en esa fecha, la primera central estaría activa a fines de 2019, mientras que todo el complejo se pondría en marcha seis años después, en 2025.