Obama anunció la retirada de 33.000 soldados de Afganistán para septiembre de 2012
Los primeros 10.000 serán retirados entre julio y finales de año, detalló el mandatario.
Obama detalló el calendario fijado para el operativo.
El presidente de EE.UU., Barack Obama, afirmó que "empezando el mes que viene y hasta finales de año" se podrán retirar a 10.000 soldados de Afganistán y que para septiembre de 2012 se habrán repatriado a 33.000 militares.
Obama hablaba así en un discurso a la nación desde la Casa Blanca para explicar el calendario de salida de Afganistán, donde en la actualidad se encuentran desplegados 100.000 soldados estadounidenses.
"Este es el comienzo, no el final, de nuestro esfuerzo para acabar esta guerra", afirmó el presidente, quien en diciembre de 2009 ya había prometido que la retirada de Afganistán comenzaría en julio de 2011.
Los 33.000 militares representan los refuerzos desplegados a lo largo del año pasado para detener el avance de los talibanes, impedir que Afganistán volviera a convertirse en un santuario para Al Qaeda y acelerar la formación de las tropas afganas, objetivos que el Gobierno estadounidense considera cumplidos.
El resto de los soldados estadounidenses regresará paulatinamente para completar la retirada en 2014, la fecha acordada en la cumbre de la OTAN en noviembre pasado en Lisboa.
"Tendremos que trabajar duramente para mantener los logros que hemos obtenido, a medida que retiramos nuestras fuerzas y efectuamos una transición responsable para traspasar la seguridad al Gobierno afgano", explicó el presidente estadounidense.
Al Qaeda bajo presión, según Obama
En su discurso, el mandatario afirmó que los documentos encontrados en la residencia donde murió el líder de Al Qaeda, Osama bin Laden, muestran que la red terrorista se encuentra "bajo tremenda presión".
Obama indicó que en esos documentos Bin Laden "expresaba preocupación de que Al Qaeda había sido incapaz de reemplazar de modo efectivo a terroristas experimentados muertos y que Al Qaeda ha fracasado en sus esfuerzos por retratar a Estados Unidos como en guerra con el Islam".
"Al Qaeda sigue siendo peligrosa y debemos ser vigilantes contra sus ataques, pero hemos puesto a Al Qaeda en el camino de la derrota y no cejaremos hasta que se haya logrado el trabajo", añadió el mandatario estadounidense.