Estudiantes y salida de Lavín del Mineduc: Se les fue de las manos y no pudieron sostenerlo
Ex ministro de Educación asumió como nuevo titular del Mideplan.
Secundarios llamaron a "no cambiar de ministro sin que se solucionen las demandas".
Los estudiantes secundarios y universitarios -que confirmaron que continuarán con las movilizaciones-, aplaudieron la salida de Joaquín Lavín desde el ministerio de Educación, y la consideraron una consecuencia directa del movimiento.
En el marco del cambio de gabinete realizado por el Presidente Sebastián Piñera, Lavín dejó la cartera de Educación y fue designado como nuevo ministro de Mideplan, dejando en el Mineduc al ex ministro de Justicia Felipe Bulnes.
"Conseguimos la respuesta a nuestra petición, pues exigíamos la renuncia del ministro por su inoperancia", dijo Laura Ortiz, presidenta de la Asamblea de Estudiantes Secundarios (ACES).
"Hace mucho tiempo exigíamos la respuesta del ministerio, pero esto se les fue de las manos y no pudieron sostenerlo (a Lavin)", aseguró Ortiz, que subrayó que el ministro dejó el cargo "gracias a la exigencia de los estudiantes".
Paloma Muñoz, vocera de la Federación Metropolitana de Estudiantes Secundarios (Femes), comentó que "ya decíamos que (Lavín) no era un interlocutor válido".
"El ministro era un obstáculo bastante grande, pero el problema es estructural. Por eso no queremos que se vuelva a cambiar de ministro sin que se solucionen y resuelvan nuestras demandas", sostuvo.
Universitarios celebraron
En tanto, el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica (FEUC), Giorgio Jackson, comentó sobre la salida de Lavín que "el movimiento social ha forzado un cambio político"
Aunque advirtió que el objetivo de los estudiantes no era el cambio de ministro, sino un cambio en la política de Estado sobre la educación pública, manifestó su esperanza de que los cambios anunciados "respondan a los intereses de las grandes mayorías" del país.
Añadió que esperan "que este rediseño no sea solamente instrumental, sino que responda a los intereses de las grandes mayorías", que quieren a la educación pública como centro del sistema social.
Insistió en que "si bien claramente había desconfianza hacia (Joaquín) Lavín", el objetivo del movimiento estudiantil "nunca fue el cambio de gabinete, sino el cambio en la política de Estado", y destacó que seguirán en esa línea.