Rendón: Si el Presidente tiene prontuario, el lugar para los honestos puede ser la cárcel

El coordinador nacional de Acción Ecológica, Luis Mariano Rendón, reivindicó este martes en Cooperativa la toma de la sede del Senado en Santiago del jueves, indicando que está dispuesto a asumir las consecuencias legales de su opción por la "desobediencia civil ante una institucionalidad que no es democrática".

"Cuando en un país gobierna alguien que ha violado la ley para sus operaciones especuladoras, quizás el lugar más digno para los ciudadanos honestos es la cárcel", reflexionó el activista, aludiendo a un hecho "que conoce todo el país: Piñera fue sancionado por violar la ley al hacer operaciones especulativas con información privilegiada".

"Eso lo sabe todo el mundo. Entonces, cuando alguien que tiene ese currículum o ese prontuario es Presidente de la República, decimos que la cárcel puede ser el destino más digno para otros ciudadanos", expuso Rendón en Lo Que Queda del Día.

"Nosotros venimos a cuidar Chile, no a destruirlo, y venimos a impedir que esta clase política siga destruyendo nuestro país para beneficio de muy pocos. Si en este país es delito emplazar a la clase política generada en forma antidemocrática, emplazar a una senadora que no ha elegido nadie, que no dio el ancho como ministra y la nombraron senadora (Ena von Baer), asumimos las consecuencias de ese delito", agregó.

 

Rendón abogó por un plebiscito que permita que de una vez por todas "la mayoría decida" sobre los grandes temas. (Foto: UPI)

"Asumimos la desobediencia civil"

Luis Mariano Rendón consideró que ante la "crisis social y política que vive hoy día el país la labor patriótica es modificar las instituciones para tener instituciones efectivamente democráticas".

"Nosotros por cierto no vamos a respetar una institucionalidad donde la minoría puede imponer su voluntad sobre la mayoría, por eso asumimos derechamente la desobediencia civil no violenta frente a un sistema que permite que la minoría se imponga: eso no es democracia. Lo que hemos tenido en Chile durante los últimos 20 años no es democracia, es un sistema con cerrojos constitucionales para impedir, precisamente, la expresión de la mayoría ciudadana", argumentó.

El activista también criticó las palabras del ex Presidente Ricardo Lagos, que consideró "lamentable" la acción efectuada en el Senado la semana pasada, al indicar que "las instituciones de la República tienen que defenderse siempre".

"No me extraña, pues Lagos fue la representación del momento de gloria de la institucionalidad chilena que tiene como objetivo fundamental negar el principio básico de la democracia, cual es que la mayoría decida. La Constitución 'Pinochet-Lagos' de 2005 (...) lo que hizo fue mantener absolutamente intocados los elementos esenciales de esta institucionalidad que niega la expresión de la mayoría ciudadana", señaló.

Solución a la crisis es el plebiscito

"Las situaciones de descontrol que hemos estado viviendo" en el último tiempo se explican, justamente, "porque no tenemos instituciones que permitan que las mayorías ciudadanas clarísimas que se han expresado puedan decidir los destinos de este país", agregó Rendón.

"La mayoría del país, claramente, exige que no se construyan represas en la Patagonia, y sin embargo este Gobierno minoritario -por el cual votó el 29 por ciento de los ciudadanos- sigue adelante en su intento de destruirla para privilegiar los intereses del grupo Matte y de las empresas extranjeras que monopolizan el mercado energético nacional", dijo recordando su cruzada contra el proyecto HidroAysén.

"Este Gobierno hace oídos sordos respecto de la también demanda mayoritaria de una educación gratuita... Eso es lo que está generando la crisis, y por eso nosotros estamos proponiendo un mecanismo para resolverla y que no se continúe profundizando: ese mecanismo es el plebiscito, que la mayoría pueda decidir si queremos o no queremos represas en la Patagonia, si queremos o no educación gratuita y si queremos o no respetar plenamente los derechos de la diversidad sexual", concluyó.